LAMLAYA, NICARAGUA.- El hondureño Licar Michell Bonaparte murió horas después de haberle quitado la vida a su cuñada y dejar malherida a su esposa luego que una enardecida población tomara la justicia con sus propias manos.
Bonaparte murió en el hospital regional de Bilwi, Costa Caribe Norte, debido a los golpes y la herida con una varilla de hierro que le provocaron los pobladores de la comunidad de Lamlaya tras machetear a las dos mujeres, según publicó La Prensa de Nicaragua.
Licar Bonaparte fue rescatado aún con vida mientras era linchado por la población luego que la Policía lanzara bombas lacrimógenas para esparcir a los ciudadanos, quienes tenían el objetivo de matar al hondureño.
Bonaparte, que trabajaba como buzo en Puerto Cabezas, mató de varios machetazos, luego de una discusión, a su cuñada Jhoysi Pantin López, de 27 años, e hirió gravemente a su esposa Aracely Pantin López, de 29 años.
Según han informado medios nicaragüenses, el hondureño llegó en estado de ebriedad en horas de la madrugada del lunes 6 de mayo a la vivienda y agredió a su mujer y luego le propinó varios machetazos, su hermana, mientras ella intentaba defenderla. En el violento ataque Bonaparte le propinó una puñalada, además de machetazos que le provocaron la muerte inmediata.
Aracely Pantin se encuentra luchando por su vida en el hospital Nuevo Amanecer en Bilwi. Asimismo, la organización Prilaka Community Foundation informó que desde hace varios años Lícar golpeaba a su esposa.
Se conoció que Jhoysi Pantin era madre de dos niños y su esposo se encontraba pescando en alta mar desde hace unos días.