TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) propone en su informe cinco pilares para una reconstrucción resiliente del país.
La identificación de riesgos es el primer pilar, donde se sugiere que para administrar los riesgos de desastres es necesario comprender los peligros, la exposición y las vulnerabilidades que enfrenta una comunidad. Además, así es posible prever los efectos e impactos en la sociedad y su economía.
Lo primero que debe hacer Honduras es la evaluación de múltiples amenazas, incluidas la frecuencia, la intensidad y la magnitud, en segundo lugar, identificar la infraestructura expuesta, los servicios y las comunidades, entre otros.
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El segundo pilar está orientado a la reducción de riesgos, aquí los instrumentos como políticas y programas de inversión son fundamentales para reducir los riesgos existentes y evitar que surjan otros nuevos.
También es necesario considerar los efectos asociados con el cambio climático, ya que dependiendo del tipo de riesgo, podría reducirse, o al menos reducir la exposición de una comunidad a una amenaza.
| Ruta
Se deben focalizar los recursos en algunos sectores fuertemente afectados por las tormentas como el agro y la infraestructura, pues ambos son amplios generadores de empleo.
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El tercer pilar es la preparación, ya que los riesgos pueden ser identificados y manejados, pero no es posible eliminarlos por completo. Se trata del conocimiento y las capacidades desarrolladas por los gobiernos, las empresas y las comunidades para anticipar, responder y recuperarse de los efectos de un peligro natural o un desastre.
El cuarto pilar es la protección financiera, crear estrategias para proteger a los gobiernos, empresas y domicilios del impacto económico de un desastre. Se debe tener en cuenta que los riesgos no pueden eliminarse, es importante que se proteja el equilibrio fiscal de las crisis mientras aún se pueda responder a la emergencia.
El último pilar es una recuperación resiliente, es decir, si no se puede evitar un desastre, la recuperación y la reconstrucción se pueden usar para mejorar la resiliencia en zonas afectadas.
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El paso de los ciclones Eta y Iota dejó 437,000 afectados y las pérdidas estimadas son de 45,676 millones de lempiras.
Según el informe, los esfuerzos de recuperación se deben priorizar en emplear a los sectores de la población más afectados y centrar el proceso de reconstrucción en las personas.
| Medidas
No perder de vista que el covid-19 está aquí y se debe trabajar en función de esto, debe ejecutarse un plan estricto para salvar vidas hoy, asegurar ade bioseguridad en todos los sectores.
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Marco Midence, ministro de la Secretaría de Finanzas, aseguró que el plan de reconstrucción nacional sostenible de Honduras que impulsa el gobierno tendrá un rostro humano.
“La reconstrucción se basa en la gente, es una reconstrucción muy humana y estará dirigida a respaldar a los sectores productivos para que generen ingresos y apoyar a las familias que han perdido sus viviendas”, dijo.
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Reunión
Tomando como base la propuesta de la Cepal, algunos integrantes del Consejo Consultivo afirman que se le debe dar prioridad a la infraestructura dañada y a las viviendas, que son sectores importantes para la recuperación de la economía y generación de empleo.
Por su parte, Guillermo Matamoros, integrante del Consejo, indicó que el informe de la Cepal es preliminar, pero es una importante base para comenzar a trabajar en la búsqueda de recursos y en la reconstrucción. Por su parte, Omar Rivera expuso a EL HERALDO que “creo que es indispensable que se le apueste a rehabilitar mucha de la infraestructura dañada, con un mecanismo expedito y transparente, especialmente el sector vivienda”.
El Consejo se reunió ayer con el informe de la Cepal en mano.
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