Eran cerca de las 6:30 de la tarde del pasado miércoles cuando la tranquilidad que había en la vivienda fue interrumpida por el llamado violento que hacía a la puerta la maldad.
Varios hombres que cubrían sus rostros con gorros pasamontañas llegaron hasta la humilde vivienda de Wendy Maribel Meza Amaya (33) ubicada en la colonia Ramón Villeda Morales, al sur de la capital, y sin mediar palabras se la llevaron por la fuerza junto a su hija Kimberly Fransuá Amaya Sandoval (14), una estudiante de secundaria.
Tras haber sido raptadas de su hogar, tres hijas más, de las cinco que tenía la mujer, quedaron solas y horrorizadas dentro de la vivienda.
Se presume que la menor habría intervenido para evitar que se llevaran a su madre, por lo cual los criminales se llevaron a las dos con rumbo a una laguna ubicada al sur de la colonia, donde las ejecutaron a balazos. Sus cuerpos fueron hallados por las autoridades a eso de las 9:00 de la noche del mismo miércoles.
Autoridades del Ministerio Público y equipos de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y de la Policía Preventiva realizaron el reconocimiento legal de los cadáveres e iniciaron las pesquisas del caso.
Personas honestas
Dolientes aseguraron en la morgue capitalina que la señora Meza Amaya era una mujer que se ganaba la vida honradamente con la venta de productos de abarrotería y de belleza.
En tanto, Kimberly Fransuá era alumna del Instituto Técnico Luis Bográn, donde cursaba el segundo año de ciclo común.
La menor residía con unas tías y su abuela en la colonia 3 de Mayo, pero el fin de semana decidió irse para la Villeda Morales y ayudarle a su progenitora en el negocio.
Una hermana de Wendy Maribel aseguró que ella nunca les comentó que hubiese recibido amenazas, por lo que no se explican las causas por las cuales la mataron junto a su hija.
“Mi hermana era una mujer que se ganaba la vida honradamente y no podía andar en cosas incorrectas”, expresó una doliente.
Otro hecho de violencia ocurrió casi a la misma hora en la colonia La Concepción cuando criminales armados llegaron a la casa del señor Miguel Ángel Varela Benítez (38) y lo mataron a balazos.
Los crímenes están en proceso de investigación por parte de un equipo de la DPI