Tras la captura del sexto implicado en el asesinato de la ambientalista Berta Cáceres Flores, su hija Olivia Zúniga aseguró que no dejarán de luchar hasta que se castigue a los autores intelectuales de este crimen y se cancele la concesión del proyecto hidroeléctrico de Agua Zarca a la empresa Desarrollos Energéticos Sociedad Anónima (DESA).
'Es fácil capturar a gatos, pero a los peces gordos es ahí donde queremos llegar y sentar un precedente en contra de la impunidad', enfatizó.
La familiar de la dirigente indígena agregó que 'este joven -Elvin Rápalo Orellana- nosotros tenemos información que supuestamente está altamente vinculado a la empresa DESA y muy ligado a grupos de poder económico de este país y que se dedica al sicariato'.
En la aldea El Ocote, municipio de San Pedro de Zacapa, departamento de Santa Bárbara fue capturado el jueves a alias El Comanche, otro de los implicados en la muerte violenta de Cáceres Flores a quien se le atribuye ser el coautor de este caso emblemático al igual que del homicidio en su grado de ejecución de tentativa contra el mexicano, Gustavo Castro Soto.
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'Nosotros hemos señalado como responsables de este crimen a la empresa DESA y también al Estado de Honduras como cómplice porque fueron funcionarios públicos que amenazaron de muerte a mi madre y ella lo denunció públicamente', reiteró Zúniga.
Indicó que el próximo paso a seguir por parte de los operadores de justicia es que se encarcele a las mentes y cerebros que planificaron este homicidio que trascendió las fronteras y fue repudiado por la comunidad internacional.
'Nada lo hace ser un actor intelectual, es un gato por decirlo así que recibió una orden, él sabe quién lo contrató para hacer este asesinato', destacó la hija de la extinta coordinadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh).
Cierre del ciclo
De su lado, el director de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), Ricardo Castro anunció que 'con esto cerramos el ciclo de los autores materiales, definitivamente hay tres personas que actuaron como autores intelectuales de manera intermedia, pero tenemos un compromiso de llegar hasta los autores intelectuales'.
La prueba científica aportada en el proceso investigativo por parte de esta dependencia del Ministerio Público (MP) fue lo que incriminó a Rápalo Orellana, puntualizó.
'Nosotros queremos justicia, porque somos las víctimas y vamos a seguir exigiendo justicia independientemente de que para el Estado se haya cerrado el caso', concluyó la pariente de la lideresa lenca.
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