Quien ama la tierra que lo hubo cobijado, pues le ha brindado aparte de su belleza, el beneficio de germinados frutos, y aún más de lo insustituible, cuál es la grandeza interior de sí mismo.
Los colonos, que vivieron los inicios de la formación del estado de Israel, tuvieron sin lugar a dudas un hermoso privilegio dentro de la historia, pues compartieron una singular experiencia al contemplar aquella tierra árida que los acogía.
Este suelo les pareció estéril advirtiendo que ¿acaso hubiese sido posible cultivarlo?, mientras tantos se preguntaban ¿lograremos fecundar en lo agreste?, la respuesta era que ¡podía y debía ser posible!
Así se arremangaron las mangas para vencer ese maravilloso desafío. Posiblemente eso fue lo que pensó el joven judío-polaco, Shimon, Peres, quien arribó a Israel junto a sus padres desde Kronstadt (ciudad alemana, ahora de Polonia) a la edad de 11 años.
Nacido en Wlczyn, Polonia (Vishneva, actualmente de Bielorrusia) el 2 de agosto 1923, en una época en la que Israel estaba bajo el control británico, Shimon Peres prodigó su interés por la naturaleza estudiando en la escuela agrícola.
Allá reafirmaría esa armonía existente entre hombre, raíces y tradiciones, cimentada con la iniciación de un kibbutz. Compartiendo junto a él tantos israelitas, la energía e ideas que prodigan un futuro, un mañana para la tierra promesa, era lo iniciado por Shimon Peres.
Fortificó su protección hacia la naturaleza, dentro de la política, a ella se afilió bastante joven, integrándose al partido laborista Mapei en 1946.
Su carrera política es remarcada, al concretar soluciones de paz para el Medio Oriente, a través de un diálogo franco e íntegro, que lo llevaría a tomar decisiones objetivas. Peres de ningún modo es considerado adversario con la contraparte, sino un compañero de negociaciones.
El último gran mediador
Aquella dote característica suya, estuvo basada netamente en la moderación, habría sido fundamental en la política de Israel, se podría decir que Shimon Peres, este atributo lo adquirió de sus progenitores judío-polacos, así lo exteriorizó en su diplomacia, descrita a manera de una puerta abierta, hacia los acuerdos con el medio oriente.
Fue una vía esperada y esperanzada a florecer y dar frutos, así encarnaron los israelitas también el deseo de descendencia, apreciando el honor de pisar ese suelo, el desierto Negev, es allí adonde su socialismo parece desarrollarse.
Fue bautizado con el nombre de Szymon Perski, posteriormente lo modificó a Shimon Peres. Alguno pudo atribuirle algún origen latino, pero él lo eligió Shimon Peres solo por simplificación.
Significó certeza internacionalmente y en Israel muy querido, a ello sumándole dote de ecuanimidad en conflictos los cuales eran difíciles de gestar, sin caer en guerras, ni en las armas, si bien fueron momentos de oportuna paciencia y de un grandioso carácter.
Colaboró con Ben Gurion, Golda Meir, y Yitzhak Rabin los asistió dentro de sus respectivos gobiernos, como ministro facilitado por su moderación innata.
Asumió la Presidencia de Israel en 2007, sin embargo su figura fue relevante para la unidad de la nación, su persona simbolizaba aquella templanza necesaria.
Presidente de Israel 2007-2014 primer ministro período 1984-1986 y 1995-1996, ministro del exterior 1986-1988, 1992-1995 2001-2002 de la defensa, transporte y finanzas.
Al estallar la guerra árabe-israelí en 1967, Peres torna al partido, ahí instaurando su personal toque de sobriedad y unificación, tras la dimisión de Yitzhak Rabin, ejerció la cartera de defensa conduciéndolo después a la presidencia de Israel.
En 1994 comparte el Premio Nobel con Yasser Arafat y Yitzhak Rabin, el cual les fue otorgado por el proceso de paz en el Medio Oriente. En ese tiempo se desempeñaba como ministro de relaciones exteriores de Israel.
Se encontró con el papa Francisco, en varias oportunidades, tanto en Israel como en el Vaticano. Otro encuentro importante fue con el líder Palestino Mahmoud Abbas 2014.
Falleció en 2016 a la edad de 92 años. Sucesivamente al anuncio que hizo el gobierno de su fallecimiento, acaecido en Tel Aviv.
Israel, se respiró una atmósfera entristecida de adiós, por segundos el mundo pareció paralizarse, sin embargo, los habitantes de Israel salieron a las calles, enmudecidos exteriorizando su afecto y admiración por este gran político y abnegado negociador de paz, representado en un minuto de silencio.
A su funeral asistió una multitud, todos quisieron estar presentes de algún modo, asimismo personalidades del ámbito civil, religioso, político del mundo entero, entre ellos el líder Palestino Mahmoud Abbas.
En el cementerio del Monte Herlz, (conocido también como Har Hazikaron), en Jerusalén, fue realizado el homenaje a Shimon Peres adyacente a donde yace Golda Meir, la madre de Israel y el mismo Theodor Herzl.
Miles de connacionales, le rindieron honores al último de los fundadores de Israel, Shimon Peres.
Sentimos que ha quedado un enorme vacío, arribando la nostalgia por la ausencia del gran hombre de la paz duradera y de la esperanza… un gran mediador que ha tenido el mundo. Alguno replicará que los grandes hombres deben ser eternos…