Desde la ópera prima de Sami Kafati hasta los filmes actualmente en rodaje, Tegucigalpa es la ciudad de Honduras más filmada. Y de su área urbana, ninguna zona ha sido más explotada por sus pintorescas locaciones como el centro histórico. Aquí un escueto desglose.
Catedral y Plaza Morazán
La mencionada cinta de Kafati desarrolla parte de sus escenas en el casco histórico, un centro muy diferente del actual, testimonio invaluable de la vida capitalina y la infraestructura de ese entonces.
En el filme se aprecia la calle que separaba la Catedral del resto del parque y algunos negocios que ya no existen.
Destaco la escena en la que Ángel, tras agredir al abusivo lustrabotas, ingresa a la Catedral y allí, solo y consciente de la adversidad que le espera, busca en el silencioso y vacío recinto algo que lo alivie.
Las gradas de la Catedral, repleta en horas pico de citadinos que, como si fuera un aforo, contemplan desde allí el frenesí de la gente, ha servido de materia para escenas cómicas como en el corto “Sueñan... narrando la vida” (2010), de Rony Alvarenga, en el que dos jóvenes de la calle narran las vicisitudes de algunos transeúntes como si de un partido de fútbol se tratara.
“No amanece igual para todos” (2010) tuvo escenas en la plaza central, de las que resalto dos: la plática entre dos muchachas que no han tenido éxito en la búsqueda de empleo y el debate entre el doctor y el lic. (Jimmy Rodríguez y Eduardo Bahr) sobre la desesperanza de los hondureños ante la difícil realidad.
La Peatonal
Del 2015 muchos recuerdan a Nelson Salgado, quien creaba sobre el piso réplicas de las pinturas del Museo del Prado expuestas en paneles. Roberto Budde en el documental “Del Prado a tus pies” retrata ese acto de amor al arte.
“Cipotes” (2017), la adaptación que hizo Boris Lara de la novela de Ramón Amaya Amador, tiene escenas con Folofo y los demás lustrabotas a lo largo del también llamado Paseo Liquidámbar, desde el Teatro Manuel Bonilla (donde logra que lo dejen vender periódicos) hasta el Parque Central, donde juega apostado, trabaja y platica con sus amigos.
Josué Orellana utilizó este tramo altamente transitado para denunciar en su corto documental “Hostis” el acoso callejero que sufren las mujeres.
Teatro Nacional Manuel Bonilla
Dos proyectos de Moisés Sánchez sobre la tragedia de las balletistas de Costa Rica que perecieron en un accidente vial en la carretera al sur en 1965 tienen su clímax dramático en el TNMB. Esas piezas son el documental “La tragedia del ballet” y el corto de ficción “El otoño de tus labios”.Los Dolores
En “No amanece igual para todos” se aprecia la Plaza Los Dolores cuando aún estaba atestada de vendedores.Una escena peculiar es la de la niña adivinadora, show moderado por Vicente Valladares. De “Cipotes” es memorable la escena en que Folofo deambula de noche buscando dónde dormir mientras suena una canción de Nilo Espinal.
Barrio Abajo y La Concordia
El corto “Limpiando chaqueta” (2000), de Mario Jaén, sobre las maras, tiene escenas en el Parque La Concordia, cuando una pandillera (Cecilia Pavón) se entera que su pareja ya no puede estar más con ella ni hacerse cargo del niño en común.En el corto “Feliz cumpleaños Miguel” (2010), los exteriores fueron filmados en el barrio Abajo, Las Delicias y Los Dolores.
La Leona
José Olay rodó una escena de “El último secuestro” (2005) en el emblemático parque, cuando se realiza una entrega en medio de las negociaciones por liberar a la secuestrada.El parque reaparece en otro filme, el fallido “Un malo no tan malo” (2010) de Toby Murillo. En una larga secuencia, el protagonista recorre el animado parque e interactúa torpemente con varios paseantes.
En “Cipotes”, el parque aparece en escenas nocturnas: allí Folofo pernocta por primera vez en la calle, en una casa de enfrente Catica trabaja como empleada doméstica y cuando en el parque intentan abusar de ella.
El corto “La huelga” fue rodado en La Ronda y La Leona. Lo sé, quedaron muchos filmes y sitios sin mencionar. Quedará para otra ocasión