TEGUCIGALPA, HONDURAS.- ”Anchuria” es el título de la nueva novela de Giovanni Rodríguez, nombre con que aparece Honduras en el libro “De repollos y de reyes” (Of Cabbages and Kings) de O. Henry, escrito como consecuencia de haber residido en Trujillo durante seis meses a principios del siglo XX.
Esta novela, recién publicada bajo el sello editorial de Mimalapalabra, posee firmes raíces en la historia literaria hondureña y en ella el relato se entreteje con la ficción histórica, de lo cual emerge un mundo del todo reconocible.
En su transcurso Giovanni Rodríguez despliega una notable libertad narrativa, y el resultado de su trabajo creativo es una novela sólida, audazmente proporcionada, en la que cada montaje literario resulta tan convincente como la solución de un problema matemático.
El autor se ha documentado con los libros escritos sobre O. Henry (o William Sydney Porter), el capitán de la industria bananera Samuel Zemurray, y los mercenarios Lee Christmas y Guy “Machine Gun” Molony.
Ha sabido explotar los detalles así obtenidos y, con su sentido de la historia, ha preparado la mezcla (o poción) expresiva en la cual verdad e invención resultan indistinguibles.
Con ello “Anchuria” consolida un territorio propio marcado por la vitalidad imaginativa.
En esta novela, por tanto, es dable hallar una combinación de pistas y alusiones signada por la inteligencia del autor que es capaz de percibir asociaciones o consanguinidades entre hechos que otros no captan o no relacionan.
Y es que ver y descubrir lo acontecido en el pasado también incluye aquí la capacidad de reconstruirlo en la imaginación.
Así, “Anchuria” obedece a sus propias leyes, a su lógica interna, y crea un espacio verbal en el cual la invencióֶn literaria fortifica su territorio mediante el ejercicio de una ironía dotada de capas múltiples, de sustratos superpuestos.
Las tramas paralelas del historiador local y de la historiadora oriunda de Nueva Orleans palidecen frente a las vicisitudes de los norteamericanos en la costa Norte de Honduras y terminan por convertirse en extensas notas a pie de página, pues, en definitiva, dada la distancia que trae consigo el paso del tiempo, lo que importa es que el novelista sea una especie de vínculo entre el pasado y el presente.
Cabe señalar el brillante capítulo que reconstruye la estadía de William Sydney Porter en Coralio (es decir, Trujillo), del todo verosímil y apegado al ritmo de Of Cabbages and Kings.
Y es que merced a la habilidad creativa de Giovanni Rodríguez, “Anchuria” se troca en una suerte de colmena construida por las abejas de la imaginación.
