Un grupo de personas llegó este viernes al Juzgado de Letras Penal de Tegucigalpa a exigir justicia para la niña Ana Lucía Rodríguez, en la audiencia inicial contra sus presuntos asesinos.
Con pancartas, sumidos aún en el dolor y con lágrimas rodando por sus mejillas, pero también llenos de indignación, familiares de la menor que fue violada y luego asesinada el pasado domingo alzaron su voz para clamar que el peso de la ley recaiga sobre los culpables.
Primos, tíos, amigos y vecinos solidarios vestían camisas blancas con el rostro de la pequeña que cursaba el segundo grado en una escuela bilingüe y era considerada la alegría del bloque donde vivía.
'Pedimos a las autoridades la condena máxima para estos criminales violadores', 'que este crimen sea castigado porque le quitaron la vida a una niña inocente', 'los padres, hermanos, abuelos y toda la familia y amigos y todo el país pedimos justicia por el sangriento crimen contra Ana Lucía Rodríguez Jiménez', rezaban algunos de los mensajes.
La audiencia inicial contra Alix Omar Cálix, alias “Lica” y Armando Josué Arias Alvarado, alias “Chele Camión” son presentados esta mañana como los principales sospechosos del asesinato.
La menor fue encontrada por sus padres, agonizando, en el apartamento que alquilaba Cálix en la colonia Víctor F. Ardón.
Las pruebas los inculparían en el caso, que ha generado repudio y consternación en la sociedad hondureña.
Los dos hombres fueron llevados el pasado lunes a Medicina Forense, donde les practicaron pruebas de ADN, toxicológicas, físicas, clínicas, psicológicas, psiquiátricas y odontológicas, entre otras.
Entre los dolorosos detalles que han trascendio del caso, se conoció que uno de los sujetos mordió a la pequeña en una de sus mejllas, presumiblemente porque la niña habría tratado de defenderse de sus verdugos.
A los implicados en el hecho criminal les podría caer una pena de más de 50 años de cárcel, por los delitos de violación especial y asesinato.
El Código Penal de Honduras establece entre 15 y 20 años por el primer delito y hasta 30 por el segundo ya que podría ser considerado asesinato agravado.