TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La desesperación y la esperanza se entrelazan en este momento en la vida de don Elvin Izaguirre, padre de Elvin Josías Izaguirre, quien vive un completo calvario al no saber nada del paradero de su hijo.
Hace apenas unas horas fue estremecido por el hallazgo de cuatro cuerpos de los cinco jóvenes desaparecidos mientras hacían una mudanza desde la Residencial Honduras hasta la colonia Mirador de Oriente, en Tegucigalpa, la capital de Honduras.
Tras días de búsqueda, cuatro de ellos fueron encontrados en una zona montañosa del municipio de Tatumbla.
Sin embargo, para don Elvin, la incertidumbre continúa, pues todavía no sabe si el de su hijo está entre los cuerpos encontrados.
El reciente hallazgo de los cuatro cuerpos trajo un rayo de esperanza y a la vez un profundo temor, “como padre, uno siempre tiene esa esperanza”, declaró con un semblante destrozado y una voz casi entrecortada a EL HERALDO.
“Seguimos esperando las noticias y ya hoy en la mañana dijeron había dos cuerpos más que no estaban identificados, entonces hay uno más que falta, uno como padre siempre abriga esa esperanza de vida”, explicó.
La frustración de Elvin se agrava con la falta de respuestas por parte de las autoridades policiales, que pese a que se encuentran desde ayer (28 de junio), en la noche, en la escena donde fueron encontrados los cuerpos, no han tenido una comunicación fluida con el desesperado progenitor, quien solo busca mantenerse al tanto de lo que acontece con la identificación de los cuerpos.
“Al oficial, hace un ratito, le llamé, le digo: ‘Oficial, ¿qué información tiene? ‘No todavía estamos buscando’(respondió), o sea, toda la semana, me ha dicho lo mismo y hoy todavía me sigue diciendo lo mismo”, reveló con una notable molestia e indignación.
El llamado de don Elvin a las autoridades refleja el sentimiento casi generalizado en toda la población hondureña tras la desaparición de los cinco jóvenes, pues el desenlace hasta el momento está siendo fatal y hay más preguntas que respuestas en el caso.
Además, criticó que hasta ayer las autoridades informaron sobre la captura de cinco miembros de la Pandilla 18 que serían sospechosos de los asesinatos de los cinco jóvenes y que fueron detenidos desde el lunes, e ironizó que “los noticieros saben más que las autoridades”.
“El jueves, que ya estaba lo mismo (la captura), el oficial (Juan) Sabillón, no entiendo cómo es que no nos dijeron nada, no entiendo cómo es que no nos dijeron nada, que ya tenían captura, o sea, no sé, no entiendo”, criticó Izaguirre.
Una buena acción de Elvin Josías
Elvin Josías, un joven de 20 años conocido por su amabilidad y disposición para ayudar a los demás, decidió apoyar a un excompañero de trabajo en sus labores de mudanza la tarde del domingo 23 de junio, sin imaginar que todo terminaría en estos angustiosos momentos para su familia.
El padre de Elvis aseguró que no conocía a ninguno de los otros cuatro jóvenes, pero sabía que su hijo mantenía una amistad con Roger Coleman, al coincidir en su anterior trabajo en un call center.
“Coleman (Roger) fue un excompañero de trabajo de él, eso es todo lo que sé, ni siquiera eran compañeros actuales, se establece un compañerismo y entonces, pues él pidió ayuda y él (Elvin Josías) la brindó sin pensarlo, o sea, inocentemente, solamente iba a ayudarle a trasladar cosas para una nueva casa”, declaró.
Elvin Josías, de apenas 20 años, no vio peligro en la acción y en su noble gesto y acompañó a Roger, su pareja y otros dos jóvenes en las labores, pese a que no contaba con el permiso de su padre, quien lamentó no percatarse de la decisión de su hijo.
“Él sabía que le iba a decir que no, si él me hubiera comentado eso, por eso no me dijo nada y ya saben que uno como padre, uno ve más allá de peligro de las cosas, entonces a veces en su ingenuidad, en su deseo de ayudar a su excompañero, pues no le dijo que no”, lamentó.
Don Elvin reveló que no tuvo comunicación con su hijo durante el domingo y fue hasta el lunes que en su lugar de trabajo le notificaron que no se presentó y desde ahí han transcurrido sus tormentosos días.
El padre también está consiente de lo peor
Aunque en su corazón se mantiene más viva la esperanza, don Elvin es consciente de la dura realidad: su hijo podría ser encontrado muerto y convertirse en el quinto cuerpo encontrado o estar entre los cuatro que ya fueron sacados de la montaña y llevados a la morgue del Ministerio Público para su identificación.
“Los oficiales, ahí están diciendo que es seguro que hay un quinto cuerpo”, declaró Izaguirre, esperando que no sea así, pese a que las autoridades lo dan como “un hecho”.
Sin embargo, su principal petición es clara y necesita ser informado con exactitud si fue encontrado o no el cuerpo de su hijo y no darse cuenta por los medios de comunicación, como hasta ahora lo han hecho.
“Yo lo que quiero es a mi hijo ya, para darle cristiana sepultura si corresponde, lo que digan ahora las autoridades o lo que hagan ahora ya no sirve, ya no me van a devolver a mi hijo, yo quisiera que fueran ágiles... Aunque fuera en estos últimos momentos tuvieran esa agilidad de responder”, enfatizó con un notable tono de tristeza.
Las autoridades continúan en la búsqueda de lo que consideran “el quinto cuerpo”, la extracción de los otros cuatro se realizó de manera lenta debido a las dificultades de la zona montañosa donde fueron encontrados los jóvenes.
La frustración del progenitor con las autoridades es evidente en medio de la angustia, por la manera en que se ha manejado el caso, y solo pide que estos momentos de incertidumbre y desesperación terminen, aunque sea con un triste final.
