Tegucigalpa, Honduras
Ocho personas capturadas, más 500 cabezas de ganado vacuno decomisadas, cuatro armas de grueso calibre incautadas y el aseguramiento de otros 62 bienes fue el resultado de la Operación Volcán ejecutada por la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado (Fescco) y la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) en la zona occidental del país.
Los capturados fueron identificados como Samuel Antonio Hernández, Fanny Dayannara Henríquez, Erik Lenín ávila, Fernando López, Sharon Steffy López, Arnold Jeovanny Hernández, Elvin Noé Peña y Silda Dubany Barraza, ligados al delito de lavado de activos.
Según informó el Ministerio Público, estas personas tienen nexos con el señor Johny Osman Hernández Arita, a quien se le vincula con el delito de lavado de activos.
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La operación denominada Volcán está dirigida al aseguramiento de bienes de Hernández Arita, quien el 9 de enero de 2010 fue detenido en El Salvador junto a otros hondureños que transportaba cinco kilos de clorhidrato de cocaína.
En El Salvador el hondureño fue condenado por facilitar el transporte de la droga y se sometió a una medida que le disminuyó la pena, por lo que salió en libertad.
AntecedentesJohny Osman Hernández Arita fue capturado en El Salvador en el 2010 junto a los hondureños Francisco Guerra Arita, Manuel Orlando Hernández y los salvadoreños Moris Alexander Vásquez Pineda y Anael Antonio Chávez. |
El objetivo también era la captura de Hernández Arita, pero logró huir supuestamente a Guatemala. Muchas de las viviendas allanadas en la operación Volcán estaban habitadas por los capturados y en una de ellas decomisaron un fusil AR-15 y tres pistolas.
Los fiscales también decomisaron un lote de venados cola blanca, que se encuentran en peligro de extinción.
Las casas con finas decoraciones y acabados de madera están rodeadas de amplios terrenos y otras están situadas en zonas céntricas de Ocotepeque.
En virtud de una denuncia recibida en el año 2016, la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico realizó investigaciones que permitieron establecer la existencia de un patrimonio considerable cuya procedencia no se ha podido justificar, por lo que se puede deducir que las actividades ligadas al narcotráfico, de las cuales se tienen antecedentes, son generadoras del patrimonio asegurado, según informó el Ministerio Público.
