Los capitalinos envian a la atroz hoguera los sinsabores que dejó el 2014 con explosivos espectáculos callejeros en los barrios y colonias.
Los muñecos arderán en llamas cuando el reloj marque la medianoche para dar la bienvenida a un esperanzador 2015.
En el sector uno de Nueva Suyapa, la tradicional quema tuvo como antesala una peculiar recolecta de dinero por parte de un grupo jóvenes que bailaban al ritmo de la punta, ataviados de aterrados disfraces.
“Compartimos esta alegría, en especial con los más niños, para celebrar la llegada de un mejor año”, expresó Nelson Javier Reyes, con el rostro cubierto de una terrorífica máscara, mientras agitaba una lata.
Reyes explicó que desde el 27 de diciembre se dedicaron a recoger dinero en la calle principal, lo que representa una tradición en la populosa comunidad.
Mientras la legión de monstruos paralizaba el tráfico, un muñeco guindaba de un poste, arreglado con una bata de médico para representar a uno de los villanos de 2014.
“Mario Zelaya; detenido por fraude al IHSS y por robarse el suero”, rezaba el rótulo del enorme monigote, en señal de repudio a la corrupción.
Los jóvenes explicaron que para la quema del muñeco tomaron las precauciones necesarios, como acordonar la zona de la quema con un lazo para evitar lesionados.
Y es que la municipalidad emprendió estos últimos días operativos para decomisar muñecos cargados de petardos, en cumplimiento con una ordenanza municipal.
No obstante, el estruendo de la medianoche en toda la capital confirmó que, a pesar de los esfuerzos, los capitalinos se las ingeniaron para desahogar sus penas y molestias.