TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En medio de la emergencia sanitaria que desató la llegada del Covid-19 al país, la urgencia de adquirir alimentos, medicinas o visitar instituciones bancarias es incontenible.
Sin embargo, el arrebato durante el segundo día de abastecimiento segmentado no pasará desapercibido para la contagiosa enfermedad que azota a Honduras y el mundo.
Las consecuencias serán inevitables y cuando llegue la factura, lamentos y lágrimas no remediarán nada.
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Los 39 infectados y un deceso le adjudican a Francisco Morazán el segundo lugar de departamentos más afectados. El primer lugar lo mantiene Cortés con 103 pacientes y 7 muertos.
Rayada advertencia
El pronóstico que avizora un panorama de luto y dolor no viene de improvisados o pesimistas, al contrario, el sermón sale del personal médico que se encuentra en primera línea combatiendo al nuevo coronavirus que se propaga en el país.
Para el presidente de la Asociación de Médicos del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), Carlos Umaña, el gobierno ya autorizó a las personas salir de sus casas para surtirse, en consecuencia solo queda dar la oportunidad para que mañana termine el tropel.
“Si logramos reducir la circulación y solo los que tienen sus dígitos autorizados (7, 8, 9 y 0) salen el viernes, recomendaría una cuarentena total para la próxima semana y que nadie salga”, expresó el galeno a un día de culminar la primera semana de vigencia de las disposiciones de circulación bajo la modalidad del último número de la cédula de identidad.
Según las estimaciones del profesional de la medicina, en estos momentos (1 de abril) cualquier persona puede estar infectada mientras recorre las calles en busca de provisiones para pasar el toque de queda.
En ese orden de ideas, expresó que al frenar los contagios con el aislamiento es posible romper el ciclo de incubación del virus.
“Que nadie salga de sus casas, que se surta la población y que en Semana Santa pasemos en recogimiento espiritual ayunando y entregando nuestras vidas a Jesucristo”, suplicó.
Semana crucial
A criterio de la presidenta del Colegio Medico de Honduras (CMH), Suyapa Figueroa, “las erráticas” medidas de contención de la pandemia demuestran “una vez más la incapacidad” y desinterés de preservar la vida de los hondureños.
“Esto apenas empieza, estamos en el inicio del ascenso de la curva del virus, la situación más grave la veremos dentro de 15 o 20 días, ahí miraremos el verdadero caos”, anunció.
“No sabemos qué nos ocurrirá cuando el colapso en el sistema de salud sea más que evidente”, advirtió la especialista.
La titular del CMH insistió a la población adoptar las medidas de prevención para defender sus vidas. “Pido a los líderes comunitarios que incidan, en barrios, caseríos y colonias para crear un plan de vigilancia alejado de estigmas y que garantice protección y aislamiento”.
Aglomeración
Mientras, los médicos, alcaldes, policías y autoridades piden hasta el cansancio que si no se trata de una emergencia, no salgan a las calles, kilométricas filas de capitalinos atestaban ayer las afueras de bancos, supermercados y gasolineras.
Aunque en las cadenas de grandes empresas, los capitalinos guardaban su distancia, producto de la organización de sus empleados, en las plazas de abastecimiento de Comayagüela el orden fue el gran ausente.
En el mercado Zonal Belén, las autoridades policiales colocaron un retén con vallas de metal y la gente prefería pasarse por en medio de la calle para no ser revisada su identidad.
Muchos irresponsables capitalinos fueron regresados a sus hogares, pues no les tocaba circular de acuerdo con su número de identidad o simplemente no portaban el documento.
En las estaciones gasolineras, equipados con sus recipientes plásticos, los más necesitados llegaron a comprar gas para cocinar en sus modestas estufas.
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En las sucursales de los Banasupros en los diferentes barrios y colonias mantener las normas de bioseguridad, antes de ingresar a comprar, también fue imposible.
En cuanto a las calles, el tránsito vehicular fue notable, personas consultadas por este rotativo calificaron el miércoles como “un día normal”.
En medio del ajetreo de capitalinos, autoridades y vendedores, el personal de aseo de la Alcaldía Municipal realizó sus acostumbradas rondas por las calles. El objetivo de los que pasan desapercibidos por muchos es mantener la limpieza y evitar focos de contaminación.
El domingo 29 de marzo la Secretaría de Seguridad, en el marco de Sistema Nacional de Gestión de Riesgo (Sinager), decretó que hasta el 12 de abril las personas saldrán los lunes si su número de identidad termina en 1, 2 o 3, el miércoles 4, 5 y 6 mientras que el viernes será para 7, 8, 9 y 0.
Los horarios de atención son desde las 9:00 AM hasta las 3:00 PM. La medida indica que martes, jueves, sábado y domingo nadie puede salir.
