En medio del cariño sincero del pueblo católico, el presbítero Ovidio Nery Rodríguez celebró ayer sus 30 años de vida sacerdotal.
Como el pescador de hombres que está llamado a ser desde que se ordenó en 1981, festejó con la santa eucaristía sus bodas de perla con el Señor.
En su homilía -con la sabiduría popular de los refranes y la doctrina de la fe- condujo a su feligresía hacia un compromiso por rescatar Honduras.
“En nuestro país, más que condenar las tinieblas que estamos viviendo en esta crisis histórica, debemos encender una luz de esperanza”, afirmó.
El presbítero reconoció que el país vive una encrucijada muy particular, pero rescató el hecho que todos: gobierno, población y empresarios, hablan el mismo lenguaje para devolver la seguridad al país.
“En Honduras si no hay un problema hay que inventarlo, estamos confrontados frecuentemente, pero la cuota de responsabilidad es de todos. No podemos hablar de un yo sin nosotros. Tanta culpa es de la familia que no educa como de la escuela que no da clases de moral y cívica”, manifestó.
El sacerdote recordó que el ser humano fácilmente culpa a Dios de lo que le pasa sin entender que Dios no hace lo que al humano le toca hacer.
Muestras de afecto
Los fieles que han seguido su paso por la fe le entregaron todo su cariño y afecto a través de pequeños detalles como un sonoro aplauso a su loable labor en medio del sermón.
Las notas de un mariachi y extensivas muestras de amor fueron parte de las sorpresas.
Una multitud de católicos se aglomeró en torno a su pastor para retribuirle con afecto su trabajo de evangelizador incansable.
El religioso nunca esperó nada a cambio, pues como él mismo afirma: “Cuando uno se encarga de las cosas de Dios, Él se encarga de lo nuestro”.
El querido padre Ovidio, como le llaman sus fieles, se mostró feliz de celebrar este domingo junto al pueblo sacerdotal y los laicos. Y espera hoy en su aniversario seguir los pasos de Cristo hasta cruzar el umbral de la historia “ejerciendo el sacerdocio”.
Perfil
Nombre: Ovidio Nery Rodríguez
Edad: 58 años
Ocupación: sacerdote hace 30 años
Puestos desempeñados: párroco del Santuario de Suyapa por 15 años.
Párroco de la iglesia Nuestra Señora de la Visitación de la colonia Nueva Suyapa.
Actualmente: director de la Fundación Anawin.