Las botellas de plástico tardan cientos de años en descomponerse, ya que se trata de un material muy difícil de desintegrar para los microorganismos.
En sus manos está colaborar con el ambiente a partir de la reutilización de este desecho. Con la ayuda de Martha Hernández, especialista en manualidades de la Séptima regiduría de la Alcaldía Municipal, los niños que participan en el proyecto Escuelas Amigables con el Ambiente aprendieron a realizar un práctico taburete o banquito hecho a base de botellas de gaseosas o refrescos.
“Los conocimientos adquiridos los compartimos con los capitalinos para que apliquen en sus hogares esta práctica amigable con el ambiente. Hay una infinidad de objetos decorativos que podemos realizar a partir del reciclaje de botellas, como un delicado banco que nos será de mucha utilidad en casa, y lo mejor de todo es que no invertirá muchos recursos, solo hará falta su creatividad y conciencia ecológica”, manifestó Hernández.
Los materiales:
- Ocho botellas vacías de 1.5 litros o 7 botellas de 3 litros
-Un círculo de cartón
-Una tijera
-Cinta de embalaje
-Un masking tape
-Papel periódico
-Pegamento (engrudo
y silicón o cola líquida)
-Papel bond blanco
-Retazos de tela
-Pinceles y acuarelas de colores.