Zúrich, Suiza
A sólo tres días de la elección del nuevo presidente de la FIFA que tendrá lugar este viernes, el príncipe jordano Ali bin al Hussein, uno de los cinco candidatos y rival derrotado por Blatter en los anteriores comicios de mayo, pidió el aplazamiento de las votaciones por considerarlas carentes de transparencia.
El presidente de la Federación Jordana ha hecho de la instalación de cabinas de votación transparentes para el escrutinio que tendrá lugar en Zúrich su principal caballo de batalla en las fechas previas a los comicios, con la intención de evitar, según él, que los votantes realicen selfies para probar que cumplen con las consignas de voto recibidas.
Con ese objetivo ha recurrido al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), la más alta jurisdicción deportiva, que se pronunciará el jueves como muy tarde.
Al príncipe jordano se le ha unido en este combate otro 'pequeño' candidato, el francés Jérôme Champagne, que le aportó su apoyo el martes al final de la jornada.
'Sólo una cabina electoral transparente permitiría probar que cada votante vota según sus principios y conciencia y que no se produce un voto obligado, impidiendo así a los votantes fotografiar sus papeletas para demostrar que cumplieron con una eventual consigna de voto', había explicado el sábado uno de los abogados del príncipe, Renaud Semerdjian, a la AFP.
Contactada para que ofreciera una reacción, una portavoz de la FIFA respondió: 'Los votantes podrán llevar consigo sus teléfonos celulares en la sala del congreso, pero deberán dejarlos en el momento en que vayan a votar'.
'Esta actitud es incomprensible, salvo si quieren obstinarse en no garantizar la transparencia de las operaciones de votación y la sinceridad del escrutinio', replicaron el martes los abogados del príncipe jordano.
El TAS anunció que el aplazamiento de la elección no tendrá lugar.
'La cuestión se centra solo en la instalación de cabinas transparentes y la designación de escrutadores independientes', precisó Matthieu Reeb, secretario general del TAS.
'El aplazamiento de la elección solo fue pedido en el caso de que no le fuera posible al TAS pronunciarse sobre la cuestión de las cabinas antes del viernes. El aplazamiento no se debatirá ya que una decisión del TAS se dará antes del jueves', añadió.
Nueve meses de escándalos
La FIFA está inmersa desde hace nueve meses en un gran escándalo de corrupción, y está siendo investigada por la justicia estadounidense y suiza.
Durante las últimas elecciones, en mayo, el príncipe Ali obligó a una segunda votación ante Blatter al recibir 73 votos por los 133 del suizo, antes de retirarse. Pero Blatter se vio forzado a renunciar al puesto debido al escándalo que sacudió la FIFA, y que ha desencadenado este nuevo proceso electoral.
Pero esta vez, a diferencia de lo ocurrido en mayo, las posibilidades del jordano parecen remotas frente a los dos grandes favoritos, el jeque bahreiní Salman (presidente de la Confederación Asiática), y el italo-suizo Gianni Infantino (Secretario General de la UEFA).
Ambos cuentan ya con el apoyo de algunas confederaciones: Salman es respaldado por Asia y África, e Infantino por Europa y Sudamérica, así como por una parte de Centro y Norteamérica. El resto de federaciones de América del Norte y Oceanía no han hecho pública su intención de voto.
Así pues, la intensa actividad procesal que lleva a cabo estos días el príncipe Ali a escasos días del escrutinio parece más una cuestión de honor, que coincide además por la desplegada por otro candidato 'modesto', Jérôme Champagne.
El francés denunció el lunes ante la comisión electoral de la FIFA el elevado número de 'observadores' de la UEFA y de la AFC acreditados para el congreso, lo que el candidato francés interpreta como un intento para hacer campaña hasta el último momento en favor de Infantino y de Salman.
Dos pesos pesados ante los que el último de los cinco candidatos, el sudafricano Tokyo Sexwale parece un mero figurante, al igual que Ali y Champagne.
Sea cual sea el futuro presidente de la FIFA, podrá pronto leer una biografía autorizada de Blatter, firmada por un antiguo portavoz, que saldrá en marzo en alemán, antes de una versión inglesa prevista en junio.
A sólo tres días de la elección del nuevo presidente de la FIFA que tendrá lugar este viernes, el príncipe jordano Ali bin al Hussein, uno de los cinco candidatos y rival derrotado por Blatter en los anteriores comicios de mayo, pidió el aplazamiento de las votaciones por considerarlas carentes de transparencia.
El presidente de la Federación Jordana ha hecho de la instalación de cabinas de votación transparentes para el escrutinio que tendrá lugar en Zúrich su principal caballo de batalla en las fechas previas a los comicios, con la intención de evitar, según él, que los votantes realicen selfies para probar que cumplen con las consignas de voto recibidas.
Con ese objetivo ha recurrido al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), la más alta jurisdicción deportiva, que se pronunciará el jueves como muy tarde.
Al príncipe jordano se le ha unido en este combate otro 'pequeño' candidato, el francés Jérôme Champagne, que le aportó su apoyo el martes al final de la jornada.
'Sólo una cabina electoral transparente permitiría probar que cada votante vota según sus principios y conciencia y que no se produce un voto obligado, impidiendo así a los votantes fotografiar sus papeletas para demostrar que cumplieron con una eventual consigna de voto', había explicado el sábado uno de los abogados del príncipe, Renaud Semerdjian, a la AFP.
Contactada para que ofreciera una reacción, una portavoz de la FIFA respondió: 'Los votantes podrán llevar consigo sus teléfonos celulares en la sala del congreso, pero deberán dejarlos en el momento en que vayan a votar'.
'Esta actitud es incomprensible, salvo si quieren obstinarse en no garantizar la transparencia de las operaciones de votación y la sinceridad del escrutinio', replicaron el martes los abogados del príncipe jordano.
El TAS anunció que el aplazamiento de la elección no tendrá lugar.
'La cuestión se centra solo en la instalación de cabinas transparentes y la designación de escrutadores independientes', precisó Matthieu Reeb, secretario general del TAS.
'El aplazamiento de la elección solo fue pedido en el caso de que no le fuera posible al TAS pronunciarse sobre la cuestión de las cabinas antes del viernes. El aplazamiento no se debatirá ya que una decisión del TAS se dará antes del jueves', añadió.
Nueve meses de escándalos
La FIFA está inmersa desde hace nueve meses en un gran escándalo de corrupción, y está siendo investigada por la justicia estadounidense y suiza.
Durante las últimas elecciones, en mayo, el príncipe Ali obligó a una segunda votación ante Blatter al recibir 73 votos por los 133 del suizo, antes de retirarse. Pero Blatter se vio forzado a renunciar al puesto debido al escándalo que sacudió la FIFA, y que ha desencadenado este nuevo proceso electoral.
Pero esta vez, a diferencia de lo ocurrido en mayo, las posibilidades del jordano parecen remotas frente a los dos grandes favoritos, el jeque bahreiní Salman (presidente de la Confederación Asiática), y el italo-suizo Gianni Infantino (Secretario General de la UEFA).
Ambos cuentan ya con el apoyo de algunas confederaciones: Salman es respaldado por Asia y África, e Infantino por Europa y Sudamérica, así como por una parte de Centro y Norteamérica. El resto de federaciones de América del Norte y Oceanía no han hecho pública su intención de voto.
Así pues, la intensa actividad procesal que lleva a cabo estos días el príncipe Ali a escasos días del escrutinio parece más una cuestión de honor, que coincide además por la desplegada por otro candidato 'modesto', Jérôme Champagne.
El francés denunció el lunes ante la comisión electoral de la FIFA el elevado número de 'observadores' de la UEFA y de la AFC acreditados para el congreso, lo que el candidato francés interpreta como un intento para hacer campaña hasta el último momento en favor de Infantino y de Salman.
Dos pesos pesados ante los que el último de los cinco candidatos, el sudafricano Tokyo Sexwale parece un mero figurante, al igual que Ali y Champagne.
Sea cual sea el futuro presidente de la FIFA, podrá pronto leer una biografía autorizada de Blatter, firmada por un antiguo portavoz, que saldrá en marzo en alemán, antes de una versión inglesa prevista en junio.