MONTEVIDEO, URUGUAY.- La
Copa Libertadores y las lesiones despoblaron a la selección uruguaya para los encuentros amistosos de este mes contra Brasil y Francia, y obligó al DT
Oscar Tabárez, que no oculta su molestia, a echar mano a todos los recursos.
Como fichas de dominó, los lesionados fueron cayendo y saliendo de la lista de convocados por el técnico.
Al menos el Maestro no ha perdido a sus dos máximas figuras, los delanteros del Barcelona, Luis Suárez, y del París SG, Edinson Cavani, pero la lista de ausentes es interminable, y volvió a crecer este miércoles.
Primero fue el turno del defensa del Atlético de Madrid José María Giménez, y de Gastón Silva, del Independiente argentino, ambos lesionados. Pero a la lista se sumaron otros que, uno tras otro fueron dejando 'en los huesos' a Uruguay para medirse contra dos campeones del mundo.
El comunicado del sábado de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), parecía interminable entre nombres y explicaciones de cada una de las lesiones.
Diego Godín, pilar de la zaga celeste, capitán de Uruguay y héroe de la última victoria del Atlético sobre el Athletic de Bilbao, terminó jugando lesionado por media hora porque los rojiblancos no tenían más cambios disponibles, y se pierde los amistosos.
El portero Fernando Muslera, un histórico celeste, lesionado con un corte; Cristhian Stuani, de gran momento en el Girona y herramienta de recambio habitual de Tabárez en el ataque que comandan Luis Suárez y Edinson Cavani, también fuera de combate por 'edema muscular'.
Además Marcelo Saracchi, de reciente incorporación a los celestes, se lesionó jugando por el Leipzig alemán el sábado.
Y como si los problemas en la defensa no fueran suficientes para Tabárez, el lunes la AUF anunció que el habitual reemplazo de Giménez, Sebastián Coates, del Sporting portugués, registró 'un sufrimiento de cuádriceps izquierdo' y también quedó al margen de los dos choques amistosos.
La historia no terminó allí: en las prácticas en Londres , Eric Cabaco se lesionó un tobillo el martes y fue convocado de urgencia Mauricio Lemos desde Italia, informó en la mañana del miércoles el diario El País, en la última de una insólita seguidilla de malas noticias para la celeste.
Los convocados para sustituir a algunos de los lesionados fueron Martín Silva de Vasco Da Gama para la valla, Bruno Méndez de Wanderers en lugar de Godín, y Emiliano Velázquez del Rayo Vallecano español en lugar de Coates.
Pero para Tabárez, no solo la naturaleza hizo su parte para que Uruguay llegara debilitado a dos partidos importantes contra potencias del fútbol mundial que vendrán con todas sus armas.
El peso de la Libertadores
Nahitan Nández, de Boca Juniors, y Camilo Mayada de River Plate, fueron marginados de la convocatoria a pedido de la Conmebol, para que pudieran participar en las finales de la Copa Libertadores, un histórico duelo entre los dos equipos más populares del fútbol argentino que tuvo el domingo su primer capítulo con empate 2-2.
El estratega celeste no ocultó su ofuscación por el pedido de la confederación sudamericana y por el número insólito de lesionados.
'Es una situación inédita', dijo Tabárez a la prensa que lo despidió en Uruguay antes de viajar a Londres.
'Los equipos que tienen poder de convocatoria hacen valer lo suyo y siempre están planteando lo suyo', dijo 'el maestro', de 71 años. Para el DT, la Conmebol puso 'en un brete (encrucijada) a la AUF'.
'Es la primera vez que se hace la lista de convocados y después se tienen que hacer tantas modificaciones', dijo preocupado Tabárez.
Está por verse esta 'nueva' cara de Uruguay, impuesta por las circunstancias, y cómo el equipo se amolda al dúo Suárez-Cavani sin la experiencia del capitán Godín o de Muslera.
Los choques están previstos para el viernes en Londres contra Brasil, y el 20 contra Francia en París.
Como fichas de dominó, los lesionados fueron cayendo y saliendo de la lista de convocados por el técnico.
Al menos el Maestro no ha perdido a sus dos máximas figuras, los delanteros del Barcelona, Luis Suárez, y del París SG, Edinson Cavani, pero la lista de ausentes es interminable, y volvió a crecer este miércoles.
Primero fue el turno del defensa del Atlético de Madrid José María Giménez, y de Gastón Silva, del Independiente argentino, ambos lesionados. Pero a la lista se sumaron otros que, uno tras otro fueron dejando 'en los huesos' a Uruguay para medirse contra dos campeones del mundo.
El comunicado del sábado de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), parecía interminable entre nombres y explicaciones de cada una de las lesiones.
Diego Godín, pilar de la zaga celeste, capitán de Uruguay y héroe de la última victoria del Atlético sobre el Athletic de Bilbao, terminó jugando lesionado por media hora porque los rojiblancos no tenían más cambios disponibles, y se pierde los amistosos.
El portero Fernando Muslera, un histórico celeste, lesionado con un corte; Cristhian Stuani, de gran momento en el Girona y herramienta de recambio habitual de Tabárez en el ataque que comandan Luis Suárez y Edinson Cavani, también fuera de combate por 'edema muscular'.
Además Marcelo Saracchi, de reciente incorporación a los celestes, se lesionó jugando por el Leipzig alemán el sábado.
Y como si los problemas en la defensa no fueran suficientes para Tabárez, el lunes la AUF anunció que el habitual reemplazo de Giménez, Sebastián Coates, del Sporting portugués, registró 'un sufrimiento de cuádriceps izquierdo' y también quedó al margen de los dos choques amistosos.
La historia no terminó allí: en las prácticas en Londres , Eric Cabaco se lesionó un tobillo el martes y fue convocado de urgencia Mauricio Lemos desde Italia, informó en la mañana del miércoles el diario El País, en la última de una insólita seguidilla de malas noticias para la celeste.
Los convocados para sustituir a algunos de los lesionados fueron Martín Silva de Vasco Da Gama para la valla, Bruno Méndez de Wanderers en lugar de Godín, y Emiliano Velázquez del Rayo Vallecano español en lugar de Coates.
Pero para Tabárez, no solo la naturaleza hizo su parte para que Uruguay llegara debilitado a dos partidos importantes contra potencias del fútbol mundial que vendrán con todas sus armas.
El peso de la Libertadores
Nahitan Nández, de Boca Juniors, y Camilo Mayada de River Plate, fueron marginados de la convocatoria a pedido de la Conmebol, para que pudieran participar en las finales de la Copa Libertadores, un histórico duelo entre los dos equipos más populares del fútbol argentino que tuvo el domingo su primer capítulo con empate 2-2.
El estratega celeste no ocultó su ofuscación por el pedido de la confederación sudamericana y por el número insólito de lesionados.
'Es una situación inédita', dijo Tabárez a la prensa que lo despidió en Uruguay antes de viajar a Londres.
'Los equipos que tienen poder de convocatoria hacen valer lo suyo y siempre están planteando lo suyo', dijo 'el maestro', de 71 años. Para el DT, la Conmebol puso 'en un brete (encrucijada) a la AUF'.
'Es la primera vez que se hace la lista de convocados y después se tienen que hacer tantas modificaciones', dijo preocupado Tabárez.
Está por verse esta 'nueva' cara de Uruguay, impuesta por las circunstancias, y cómo el equipo se amolda al dúo Suárez-Cavani sin la experiencia del capitán Godín o de Muslera.
Los choques están previstos para el viernes en Londres contra Brasil, y el 20 contra Francia en París.