El gas licuado propano o LPG, como se le conoce popularmente en el mercado hondureño, es uno de los derivados del petróleo que mayores alzas registra en las últimas semanas.
Los constantes aumentos han generado mayor preocupación en aquellos hogares que usan ese combustible para la cocción de sus alimentos y otras necesidades vitales.
EL HERALDO ha consultado a varios expertos nacionales e internacionales en el uso y manejo del LPG para que los consumidores puedan obtener ahorros en sus presupuestos personales o familiares.
Recomendaciones
Los entrevistados coinciden que hay una serie de sugerencias que pueden generar ahorros entre 20% y 30% en la compra de gas propano.
El primero es que la persona debe saber si la estufa que usa es la más indicada para satisfacer sus necesidades, porque si el aparato es de cuatro quemadores y lo que se requiere son dos, entonces hay un mayor consumo de LPG.
Agregan que otra recomendación sencilla es verificar el estado del pase del gas, ya que el estado de las mangueras o tuberías puede implicar una fuga de ese derivado.
Los expertos consultados consideran que la persona que usa estufas de gas propano debe saber que si la base de la llama es amarillo es un indicativo que los quemadores se encuentran obstruidos o están mal regulados.
Añade que los quemadores deben ser sujetos a mantenimiento esporádico, o sea lavarlos con agua y detergente para retirar aquellos desperdicios o corrosiones provocados por derramamientos de líquidos de las ollas.
Las personas consultadas manifiestan que hay otros consejos que redundan en ahorros, por ejemplo el tipo de ollas usadas, la cantidad de agua o el tiempo de cocción de los alimentos.
También hay otras recomendaciones como el encendido, ya que primero se debe encender el fósforo antes de abrir la perilla de los quemadores.
El cilindro de mayor uso en el mercado de Honduras es el de 25 libras, principalmente en los hogares.
