Tegucigalpa, Honduras.- Los ajustes a la Tasa de Política Monetaria (TPM) continúan reflejándose en la colocación de préstamos en el sistema financiero hondureño.
El indicador de la cartera crediticia revela que este año el crecimiento ha sido menor en comparación con 2023.
Así lo constató EL HERALDO al verificar las cifras de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), las que revelan que a octubre 2024 los créditos sumaron 644,908 millones de lempiras y 637,568.4 millones en septiembre, con una diferencia de L7,339.6 millones.
Sin embargo, las cifras del año pasado son mejores, ya que el saldo de la cartera fue de 557,376 millones de lempiras a octubre, con un incremento de L8,717.6 millones respecto a septiembre, cuando se reportó una cuantía de L548,658.4 millones.
Al comparar las variaciones de estos meses de los dos años hay una reducción de 1,378 millones de lempiras equivalentes al 15.80% en la colocación de créditos.
Por las 15 instituciones bancarias, ocho compañías de seguro, diez sociedades financieras, cinco Organizaciones Privadas de Desarrollo Financieras (OPDF), una oficina de representación y la banca estatal a través del Banco Hondureño para la Producción y la Vivienda (Banhprovi) se otorgan los financiamientos para 20 actividades específicas o sectores económicos.
A propiedad raíz que abarca la construcción, reparación y mejoras para vivienda, compra de casas, solares hasta la construcción de edificaciones comerciales e industriales en las áreas urbana y rural; consumo al igual que comercio son los principales rubros en los que se concentran los préstamos en los últimos años.
Efecto
La baja registrada en el monto de los créditos conferidos es uno de los efectos del incremento de la Tasa de Política Monetaria (TPM) en el país que se sitúa en 5.75%, coincidieron analistas consultados por EL HERALDO.
A inicios de agosto el Banco Central de Honduras (BCH) determinó elevar la considerada como variable más importante para el sistema financiero nacional a 4.00%, luego de mantenerla fija desde el 27 de noviembre de 2020.
En 175 puntos básicos subió nuevamente la TPM el 24 de octubre pasado, por lo que pasó a 5.75%, de conformidad a resolución del directorio del ente rector de las políticas monetaria, cambiaria y crediticia del territorio hondureño.
En tal sentido, Honduras se convirtió en el segundo país de Centroamérica con la Tasa de Política Monetaria más alta por debajo de Nicaragua con 6.75%.
“El aumento en la TPM ocasionó un incremento en las tasas de interés activas (créditos) y un aumento en las tasas de interés pasivas (depósitos), aunque normalmente los bancos solo suben las de los créditos y muy poco las de los ahorros”, indicó la expresidenta del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), Liliana Castillo.
Sostuvo que “al aumentar la tasa de interés para los créditos se restringe los montos de créditos colocados y se limita la liquidez, lo que produce un impacto en un menor nivel de crecimiento, pero no debería ser tanto el impacto porque los agentes económicos nacionales y extranjeros están siendo cautelosos en sus inversiones”.
Mayor precio
De su lado, el presidente de la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias (Ahiba), Manuel Venancio Bueso, planteó que “el ajuste de la Tasa de Política Monetaria implementado por el Banco Central permite ajustar el valor del dinero. Consecuentemente al pagar un mayor precio por el dinero la tasa de los préstamos nuevos se incrementará y la tasa de los préstamos sobre todo a largo a plazo, pactados con tasa revisable se incrementará, conforme a lo establecido en los contratos individuales de préstamos”.
“No hay duda que el incremento a las tasas va a desincentivar la inversión en el agro y en la industria”, reconoció.
Desde el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) se advirtió que al elevarse la TPM no solo incidirá en los costos de bienes y servicios, incluyendo la Canasta Básica de Alimentos (CBA), teniendo los consumidores que asumir el impacto.