Tegucigalpa, Honduras.- El Juzgado de Letras Penal de la Sección Judicial de Francisco Morazán fijó la fecha para la audiencia preliminar en la causa instruida contra los generales en condición de retiro de las Fuerzas Armadas de Honduras, Romeo Vásquez Velásquez, Venancio Cervantes Suazo y Carlos Puerto Fúnez.
Melvin Duarte, portavoz del Poder Judicial (PJ), informó que “para el día 27 de enero, a las 11:30 de la mañana ha sido calendarizada ya esta audiencia preliminar para los tres exjerarcas militares que han sido imputados por el Ministerio Público, por el delito de homicidio en perjuicio de Isy Obed Murillo Mencías”.
Esta fecha estaría sujeta a cambios si las partes procesales en esta causa legal interpusieran recursos de apelación sobre la decisión adoptada por el juez en la audiencia preliminar. En el caso del Ministerio Público (MP) existe la posibilidad de que presente apelación sobre la medida de arresto domiciliario otorgado a los tres imputados.
Asimismo, la no recalificación a los delitos de asesinato y tentativa de asesinato, en el caso de Alex Roberto Zavala Licona, quien sufrió lesiones en los hechos enmarcados en la acusación del MP.
Entre tanto, los apoderados legales de los tres exjefes de las Fuerzas Armadas interpondrían apelaciones referentes a que no se dan los elementos probatorios de culpabilidad para continuar el proceso y por lo tanto pedirán el sobreseimiento definitivo de sus defendidos.
“Hasta este momento (ayer) que estamos transmitiendo esta información no ha sido presentado ningún recurso de apelación, ni por los equipos de la defensa, ni por el Ministerio Público; sin embargo, el plazo está corriendo, se vence mañana (hoy), así que hay tiempo para conocer si será presentado algún recurso”, explicó Duarte.
En esa audiencia preliminar, el juez podría determinar darles el sobreseimiento definitivo, o sea, liberarlos de toda culpa, o elevar la causa a juicio oral y público.
Los tres generales son acusados de homicidio y homicidio en su grado de ejecución de tentativa, por los hechos ocurridos el 5 de julio de 2009, cuando pretendía arribar al aeropuerto Toncontín el expresidente Manuel Zelaya Rosales, en el marco del golpe de Estado.
