Mayoría en el Congreso dio presidencia a Pedro Sánchez, una lección para Honduras

El PSOE no es la principal fuerza del Congreso ni ganó las elecciones generales, pero los consensos con otros diputados le dieron la victoria

Pedro Sánchez, presidente de España, mientras festejaba por haber logrado más de 176 (mayoría) votos en el Congreso de los Diputados.

jue 16 de noviembre de 2023 a las 17:15

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TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La victoria de Pedro Sánchez en España, quien seguirá gobernando por los siguientes cuatro años, demuestra que las mayorías en los congresos son las que deciden en una democracia, una lección para Honduras, en donde está ocurriendo lo contrario.

A pesar de que Sánchez, del izquierdista Partido Socialista Obrero Español (PSOE) perdió las elecciones generales en julio pasado, seguirá en el Palacio de la Moncloa gracias a los pactos con otros movimientos, que finalmente acumularon 179 escaños en el Congreso.

El 23 de julio, Sánchez obtuvo un poco más de 7.7 millones de votos, traducidos en 121 de los 350 diputados que conforman el Congreso, 55 menos representantes para tener la mayoría calificada para hacer gobierno (176).

En contraste, el principal oponente Alberto Núñez Feijóo, del derechista Partido Popular (PP), ganó los comicios: más de 8 millones de votos y 137 diputados, 16 más que Sánchez, aunque no los suficientes para gobernar sin la ayuda de alianzas.

Ese escenario dejó una lección pese a la diferencia numérica: Sánchez, aunque con menos diputados (121) será el presidente de España a través del respaldo de otras facciones de izquierda independentistas y algunas de derecha, que aglutinaron 179 congresistas, 3 más que la mayoría calificada.

Mientras que Feijóo, aunque ganó las elecciones y con más diputados que Sánchez (137), tendrá que esperar si quiere ser presidente porque no logró el suficiente apoyo de la derecha en el Congreso (171).

Más allá de los pactos que le permitieron a Sánchez mantenerse en el poder, aunque con muchos cuestionamientos de la población, es que en España la democracia se respeta, dicen analistas a EL HERALDO Plus.

Señalan que la mayoría en el Congreso es la que toma las decisiones, así como ocurrió en España, pero, lamentan, que eso no se viva en Honduras.

De hecho, Feijóo, el perdedor, aunque visiblemente rechaza el triunfo de Sánchez, admitió que “el Congreso tiene una mayoría legítima”, una forma de aceptar indirectamente la derrota.

Sánchez, especialista en pactos

La victoria de Sánchez, que muestra su sagacidad, también denota que tendrá un gobierno complicado a juzgar por las negociaciones que realizó para mantenerse en el poder.

Los analistas políticos se preguntaban el jueves en los medios españoles cómo había sido posible el triunfo de Sánchez y señalaban, entre otros elementos, justamente la sagacidad de él.

El apoyo de los siete diputados de Juntos por Cataluña de Carles Puigdemont fue el que más se le resistió a Sánchez y se consiguió con la promesa de amnistiar a los independentistas catalanes implicados en las protestas y la tentativa secesionista de 2017.

La oposición le acusó de entregar las riendas del gobierno a un “prófugo” (Puigdemont se instaló en Bélgica en 2017, eludiendo a la justicia española) y le avisó de que será cautivo de las demandas del independentismo.

En Honduras pasa que el presidente del Congreso, Luis Redondo, no ha podido realizar pactos con la oposición, como sí lo ha hecho Sánchez en el parlamento español (sin considerar el tipo de acuerdos).

Muestra de que Redondo no es un especialista en pactos es la crisis que vive el parlamento ante la imposición de los fiscales interinos del Ministerio Público (MP) por parte de la Comisión Permanente, integrada por nueve diputados oficialistas.

La oposición parlamentaria de Honduras, que tiene 74 diputados, rechaza la acción del oficialismo, pero el Ejecutivo de Xiomara Castro sigue las directrices de la minoría, cuestionan analistas.

“El problema de (Luis) Redondo es que todo lo quiere imponer; un presidente del Congreso siempre ha sido elocuente, seductor”, dijo Raúl Pineda Alvarado, analista político.

Muestra para Honduras

En diálogo con EL HERALDO Plus, Lissi Cano, diputada opositora del Partido Nacional, consideró que lo sucedido en España, “muestra la madurez de su democracia”.

“Si comparamos lo ocurrido en España con Honduras, llegamos a la conclusión que, a quienes nos gobiernan, no les interesa lo que las grandes mayorías decidieron”, puntualizó.

“La junta directiva del Congreso se impuso con 44 diputados y hay una Comisión Permanente en el Congreso, de nueve diputados, que está tomando las decisiones de 128 diputados; no hay respeto a la mayoría”, señaló.

Dijo también que la crisis parlamentaria y del Ministerio Público refleja el “retroceso en democracia, el autoritarismo del gobierno, la debilidad de la democracia y la precariedad de la institucionalidad”.

Sin embargo, Obed López, congresista del oficialista Libertad y Refundación (Libre), estimó que lo de España fue en función de que “ellos se rigen en una monarquía parlamentaria”.

Agregó en ese sentido que “no hemos logrado acuerdos con la oposición no por incapacidad, sino porque hay asuntos particulares de diputados opositores que no permiten que logremos los acuerdos”.

Asimismo, justificó que las decisiones realizadas por la Comisión Permante, compuesta por nueve congresistas oficialistas, “son constitucionales”.

Para Óliver Erazo, analista constitucionalista, el gane de Sánchez, “aunque hizo artilugios”, es un “claro ejemplo del respeto a la mayoría porque buscó el respaldo de otras fuerzas”.

“El problema de Honduras, comparándolo con España, es que acá no están respetando la mayoría en el Congreso”.

Victoria, pero a qué costo

En cuanto a la ley que podría permitir el regreso de Puigdemont, acaba de ser registrada para su examen en el Congreso y presumiblemente no estará aprobada hasta bien entrado 2024.

Esta amnistía es necesaria para “cerrar las heridas” abiertas por la crisis de 2017, afirmó Sánchez, asegurando que quiere garantizar “la unidad de España por la vía del diálogo y del perdón”.

Rechazada por la mayoría de los españoles, según varios sondeos de opinión, esta amnistía llevó el domingo a cientos de miles de personas a salir a la calle en respuesta a una convocatoria del PP.

El sábado está prevista en Madrid una nueva manifestación, en la que participarán dirigentes del PP y del partido ultraderechista Vox.

Asimismo, desde hace días hay concentraciones diarias de la extrema derecha ante la sede del Partido Socialista en Madrid, que regularmente acaban en disturbios.

El miércoles por la noche, 15 personas más fueron detenidas por alterar el orden público y enfrentarse a la policía, según la Delegación del Gobierno en Madrid.

Como consecuencia de estas tensiones, más de 1,600 policías se desplegaron de nuevo el jueves en torno al Congreso de los Diputados, completamente acordonado desde el miércoles por las fuerzas del orden.

Es el dispositivo equivalente a un partido de fútbol de alto riesgo.

Gran parte de la población española celebra el triunfo de Sánchez, pero también cuestiona los pactos que lo permitieron.

En la actualidad, el oficialismo del Poder Ejecutivo y del Congreso alardean cómo establecieron interinamente a Johel Zelaya, como fiscal general, y a Mario Morazán, como fiscal adjunto.

Según el oficialismo, fue correcto que nueve diputados fueran los necesarios para decidir a los titulares del MP pese a que la ley indica que debe de ser con la mayoría calificada del Congreso, es decir, 86 votos.

Elección en España, una peculiaridad

España es un Estado que tiene su forma política es una monarquía parlamentaria, que significa que el Congreso tiene un poder importante.

Eso quiere decir que el Congreso es el que elige al presidente en función de los representantes (o diputados) que saque cada partido político tras las elecciones generales.

En esta ecuación también entra la variable de los pactos o alianzas, como sucede en Honduras, y lo que permitió a Sánchez, aunque con los números en contra, mantenerse en el poder.

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