CALIFORNIA, ESTADOS UNIDOS.- Hollywood está en suspenso este lunes ante el estancamiento de las conversaciones para evitar que miles de guionistas de cine y televisión inicien a medianoche una huelga que podría resultar catastrófica.
Los principales estudios y plataformas, incluidos Disney y Netflix, siguen enfrascados en el diálogo con el poderoso sindicato de guionistas, el Writers Guild of America (WGA), que advirtió que declarará la huelga a partir de la medianoche de este martes a menos que lleguen a un acuerdo.
Si se produce una huelga, los programas nocturnos de entrevistas podrían detenerse de inmediato, y las series de televisión y las películas programadas para estrenarse a finales de este año y en los meses siguientes podrían sufrir grandes retrasos.
La última vez que hubo un conflicto gremial de este tipo en Hollywood, en 2007, los guionistas pararon por 100 días, lo que le costó a la industria del entretenimiento de Los Ángeles unos 2,000 millones de dólares.
Esta vez, los guionistas exigen salarios más altos y una mayor participación en las ganancias de la distribución de contenido a demanda a través de internet.
De su lado, los estudios y las plataformas, dicen que necesitan reducir costos debido a las presiones económicas.
“Todo el mundo siente que va a haber una huelga”, dijo a la AFP un guionista de televisión de Los Ángeles, que pidió no ser identificado.
Lo que está en juego es “determinar cómo seremos compensados financieramente por la difusión en ‘streaming’”, no solo ahora sino en el futuro, agregó.
“Derechos residuales”
Varios de los asuntos son similares a los discutidos en la industria globalmente.
Los guionistas dicen que les cuesta ganarse la vida con salarios estancados o devaluados debido a la inflación, mientras sus empleadores lucran y aumentan los salarios de sus ejecutivos.
Estiman que nunca hubo tantos guionistas trabajando por el salario mínimo fijado por los sindicatos, mientras las cadenas de televisión contratan a menos gente para escribir series cada vez más cortas.
Uno de los principales desacuerdos es sobre cómo se paga a los guionistas por las series difundidas por plataformas de reproducción, que en espacios como Netflix suelen permanecer visibles por años.
Desde hace décadas, los guionistas cobran “derechos residuales” por la reutilización de sus obras, un porcentaje de los ingresos de los estudios por la película o el programa, o una tarifa fija cada vez que se reproduce un episodio.
Pero con el streaming, los guionistas obtienen un pago anual fijo, incluso si su trabajo alcanza el éxito de programas como “Bridgerton” o “Stranger Things”, con cientos de millones de espectadores.
“Estas cantidades siguen siendo demasiado bajas para la reutilización global de la programación cubierta por el WGA en estos servicios masivos”, dice el gremio.
La WGA pide la revalorización de estas cantidades hoy “demasiado bajas en vista de la reutilización internacional masiva” de estos programas. El sindicato también quiere discutir el impacto futuro de la inteligencia artificial en la profesión.
Los estudios, representados por la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP), señalan que los “derechos residuales” pagados a los guionistas alcanzaron un nivel récord de 494 millones de dólares en 2021, frente a los 333 millones de dólares diez años antes.
También refutan las insinuaciones de que los estudios alegan falsamente dificultades económicas para reforzar su posición negociadora.
“¿Crees que Disney despediría a 7.000 personas por diversión?”, indicó una fuente cercana a la AMPTP.
“Hay una única plataforma [de streaming] que es rentable en este momento, y esa es Netflix. La industria cinematográfica también es un sector bastante competitivo”, apuntó.
Después del derroche de los últimos años, cuando las plataformas de ‘streaming’ rivales trataban de incrementar sus suscriptores a toda costa, los estudios están ahora bajo una intensa presión de los inversores para reducir el gasto y generar ganancias.
- “Piquetes” -
Con la medianoche (0700 GMT del martes) como plazo límite, las dos partes podrían llegar a un acuerdo de última hora, ampliar temporalmente las conversaciones o abandonarlas y prepararse para los piquetes.
Liz Alper, miembro de la junta de la WGA, tuiteó que las negociaciones continuarán “hasta la medianoche” y que poco después se enviarán instrucciones a los guionistas sobre los pasos a seguir “dependiendo de si se llega a un acuerdo o no”.
“Hoy es un día de nervios. Estamos todos en esto. No se presionen”, escribió.
La industria teme un efecto dominó. Otros sindicatos de Hollywood se han solidarizado con los guionistas, como el SAG-AFTRA, de actores, y el de directores, DGA.
Ambos mantendrán sus propias conversaciones con los estudios este verano.
“La mayor ventaja que aportamos colectivamente a una huelga es la retirada de nuestro trabajo”, escribió el WGA a sus miembros el domingo, de acuerdo con la publicación Variety que citó un mensaje al que tuvo acceso.
“Los piquetes son una táctica clave para demostrar que estamos todos juntos en esto”.