Tegucigalpa. La ruta ecológica que emprendió EL HERALDO junto a cinco centros educativos de la capital llegó a su final con la instalación del primer Congreso Infantil Ambiental .
Después de 12 semanas de arduo trabajo, los alumnos de las escuelas participantes, Jorge J. Larach, Cerro Grande II, República Oriental del Uruguay, Itzamná y Dionisio de Herrera , conocieron quiénes son los ganadores de la campaña Escuelas Amigables con el Ambiente .
En un emotivo acto de premiación, precedido por un simposio en el que los niños llevaron la batuta, se revelaron los nombres de los centros educativos acreedores a las tres categorías de la competencia.La Escuela Cerro Grande II se alzó el trofeo como la Escuela más Amigable con el Ambiente por su magnífica recolección de 6,174 libras de material reciclable, que les dejaron 20,509 lempiras de ingresos.
La Escuela Jorge J. Larach alcanzó el galardón de Escuela con el Mayor Efecto Multiplicador, y la Escuela República Oriental de Uruguay se alzó el título de Escuela con Mayor Responsabilidad Ambiental.
El evento
Con la convicción del trabajo bien hecho y el conocimiento ecológico que cimentaron con largas jornadas de formación, los niños relataron a las autoridades sus experiencias y presentaron sus propuestas para mejorar el medio ambiente en la capital.
Previo a las disertaciones, el sacerdote jesuita Juan Carlos Núñez dirigió una plegaria a Dios para agradecer que esta apuesta cerrara su ciclo de aprendizaje con éxito.“Damos gracias a Dios por estos tres meses de trabajo que cambiaron la mentalidad de los niños para rescatar la obra creadora que él nos entregó”, manifestó el presbítero.
Después de rendir honor a la patria con la entonación del Himno Nacional, se abrieron los micrófonos para dar paso a las participaciones de los niños.
Los primeros en exponer fueron los alumnos Ricardo Espinal y Aslhy Cárdenas, de la Escuela Jorge J. Larach.Con un mensaje sencillo, Ricardo manifestó que la campaña Escuelas Amigables con el Ambiente ha marcado su vida porque no solo aprendió a trabajar en equipo las tres R del reciclaje (reducir, reutilizar y reciclar), sino a tener mayor conciencia de la importancia de la clasificación de los residuos sólidos.
Otra alumna que sorprendió a las autoridades con su discurso fue Stephanie Herrera, de la Escuela Dionisio de Herrera, quien fue más allá de proponer alternativas para mejorar el entorno en las aulas y las comunidades.
La pequeña lanzó el reto de asumir un control del uso de bolsas plásticas en los comercios y supermercados.
“Una bolsa plástica tarda en degradarse unos 150 años, lo que causa una supercontaminación en el agua y el suelo, por lo que en otros países se regula y creo que ya es hora que lo hagamos nosotros”, argumentó.
Los niños fueron puntuales en sus sugerencias como el mejoramiento del sistema de recolección de basura, creación de centros de recolección, la inclusión en el Currículum Nacional Básico de la clase de educación ambiental y que en todos los centros educativos del país se desarrollen campañas como la de EL HERALDO .
Compromisos
Un emotivo video al son de la canción “Verde”, del cantautor nacional Guillermo Anderson, que recopiló el arduo trabajo de los niños a lo largo de tres meses, fue el preámbulo de las repuestas de las autoridades a las solicitudes de los niños.
Los pequeños embajadores del medio ambiente derramaron varias lágrimas al ver las imágenes de las charlas, partidos de fútbol, entrevistas, recorridos y la reforestación que realizaron en la jornada ecológica.
En este ambiente de nostalgia y felicidad, y tras escuchar los sabios consejos de los escolares, el alcalde capitalino Ricardo Álvarez, el ministro de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna), Roberto Cardona , y la representante del ministerio de Educación, Arely Argueta, se comprometieron a incluir en su agenda de trabajo las iniciativas de los niños.
“Vamos a buscar cómo podemos hacer ordenanza sus iniciativas, porque son muy importantes”, manifestó el edil.
Por su parte, Argueta informó que se gesta un proyecto para certificar a escuelas verdes desde el ministerio de Educación. “La campaña Escuelas Amigables con el Ambiente es una muestra de que juntos podemos hacer las cosas bien, es por ello y por ustedes que vamos a sacar adelante este proyecto”, aseveró.
Entretanto, Roberto Cardona destacó la importancia de la campaña para mejorar el manejo de las 1,800 toneladas de desechos sólidos que a diario se producen en la capital. “Los hemos escuchado niños, tengan la certeza que vamos a tomar en cuentas sus recomendaciones”, puntualizó.
Después de 12 semanas de arduo trabajo, los alumnos de las escuelas participantes, Jorge J. Larach, Cerro Grande II, República Oriental del Uruguay, Itzamná y Dionisio de Herrera , conocieron quiénes son los ganadores de la campaña Escuelas Amigables con el Ambiente .
En un emotivo acto de premiación, precedido por un simposio en el que los niños llevaron la batuta, se revelaron los nombres de los centros educativos acreedores a las tres categorías de la competencia.La Escuela Cerro Grande II se alzó el trofeo como la Escuela más Amigable con el Ambiente por su magnífica recolección de 6,174 libras de material reciclable, que les dejaron 20,509 lempiras de ingresos.
La Escuela Jorge J. Larach alcanzó el galardón de Escuela con el Mayor Efecto Multiplicador, y la Escuela República Oriental de Uruguay se alzó el título de Escuela con Mayor Responsabilidad Ambiental.
El evento
Con la convicción del trabajo bien hecho y el conocimiento ecológico que cimentaron con largas jornadas de formación, los niños relataron a las autoridades sus experiencias y presentaron sus propuestas para mejorar el medio ambiente en la capital.
Previo a las disertaciones, el sacerdote jesuita Juan Carlos Núñez dirigió una plegaria a Dios para agradecer que esta apuesta cerrara su ciclo de aprendizaje con éxito.“Damos gracias a Dios por estos tres meses de trabajo que cambiaron la mentalidad de los niños para rescatar la obra creadora que él nos entregó”, manifestó el presbítero.
Después de rendir honor a la patria con la entonación del Himno Nacional, se abrieron los micrófonos para dar paso a las participaciones de los niños.
Los primeros en exponer fueron los alumnos Ricardo Espinal y Aslhy Cárdenas, de la Escuela Jorge J. Larach.Con un mensaje sencillo, Ricardo manifestó que la campaña Escuelas Amigables con el Ambiente ha marcado su vida porque no solo aprendió a trabajar en equipo las tres R del reciclaje (reducir, reutilizar y reciclar), sino a tener mayor conciencia de la importancia de la clasificación de los residuos sólidos.
Otra alumna que sorprendió a las autoridades con su discurso fue Stephanie Herrera, de la Escuela Dionisio de Herrera, quien fue más allá de proponer alternativas para mejorar el entorno en las aulas y las comunidades.
La pequeña lanzó el reto de asumir un control del uso de bolsas plásticas en los comercios y supermercados.
“Una bolsa plástica tarda en degradarse unos 150 años, lo que causa una supercontaminación en el agua y el suelo, por lo que en otros países se regula y creo que ya es hora que lo hagamos nosotros”, argumentó.
Los niños fueron puntuales en sus sugerencias como el mejoramiento del sistema de recolección de basura, creación de centros de recolección, la inclusión en el Currículum Nacional Básico de la clase de educación ambiental y que en todos los centros educativos del país se desarrollen campañas como la de EL HERALDO .
Compromisos
Un emotivo video al son de la canción “Verde”, del cantautor nacional Guillermo Anderson, que recopiló el arduo trabajo de los niños a lo largo de tres meses, fue el preámbulo de las repuestas de las autoridades a las solicitudes de los niños.
Los pequeños embajadores del medio ambiente derramaron varias lágrimas al ver las imágenes de las charlas, partidos de fútbol, entrevistas, recorridos y la reforestación que realizaron en la jornada ecológica.
En este ambiente de nostalgia y felicidad, y tras escuchar los sabios consejos de los escolares, el alcalde capitalino Ricardo Álvarez, el ministro de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna), Roberto Cardona , y la representante del ministerio de Educación, Arely Argueta, se comprometieron a incluir en su agenda de trabajo las iniciativas de los niños.
“Vamos a buscar cómo podemos hacer ordenanza sus iniciativas, porque son muy importantes”, manifestó el edil.
Por su parte, Argueta informó que se gesta un proyecto para certificar a escuelas verdes desde el ministerio de Educación. “La campaña Escuelas Amigables con el Ambiente es una muestra de que juntos podemos hacer las cosas bien, es por ello y por ustedes que vamos a sacar adelante este proyecto”, aseveró.
Entretanto, Roberto Cardona destacó la importancia de la campaña para mejorar el manejo de las 1,800 toneladas de desechos sólidos que a diario se producen en la capital. “Los hemos escuchado niños, tengan la certeza que vamos a tomar en cuentas sus recomendaciones”, puntualizó.