TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Aflicción, desencanto, tristeza e indignación son algunas de las emociones que afectan a los comerciantes y emprendedores de Juticalpa producto de los constantes apagones que los han obligado a despedir a empleados y, en el peor de los casos, a cerrar sus negocios.
“Despedí a una persona que me ayudaba porque no tengo cómo pagarle y con mi familia ya hablamos que en cualquier momento cerramos el negocio”.
Así lo relató Angélica, de unos 40 años, que sentada en su salón de belleza observa como las personas pasan, pero nadie ingresa a su local porque “prácticamente solo tenemos 15 minutos de luz al día y las clientes no vienen porque saben que no las podré atender”.
EL HERALDO recorrió la zona comercial de Juticalpa, Olancho, y encontró que la teoría de los economistas en la que advierten que el crecimiento económico proyectado en Honduras para 2024 (de 3.5%) podría reducirse al 2.5% a raíz de los racionamientos eléctricos toma fuerza debido a que los pequeños y medianos empresarios olanchanos se disponen a cerrar sus negocios por falta de energía.
Afectados
Entre los comercios más activos de la región están los lácteos, y Luis y su hermano menor trabajan vendiendo lácteos desde hace muchos años porque fue el negocio que heredaron de sus padres.
Sin embargo, Luis, con su voz entrecortada y con impotencia, admite que lo tendrán que cerrar por los apagones, pues hay días que pierden entre 20,000 y 30,000 lempiras.
“Todo se pudre, esto apesta bastante y solo nos toca botarlo y tener que ver cómo conseguimos dinero para volver a comenzar, pero ahora ya no podemos porque las pérdidas son diarias. Este negocio lo comenzó mi papá hace muchos años, pero creo que es hora de ya cerrarlo por culpa de esta situación”, dijo.
EL HERALDO visitó otros establecimientos como carnicerías y el escenario de los dueños es cruel: no pueden creer que por culpa de apagones todo lo que les costó una vida se eche a perder de un día para otro.
Otros de los negocios con más demanda y también con más pérdidas son las barberías. Marcos (nombre ficticio) se ve tranquilo mientras mira televisión, aprovechando porque en cualquier momento la energía se va.
Pero al platicar con él exterioriza todo lo que no puede decir delante de su familia porque sabe que sería un fuerte golpe anímico. “Nosotros nos dedicamos a la barbería, ¿pero cómo viene la gente si no hay luz? No tengo como comprar comida, no sé qué decirle a mi familia”, declaró.
Estos casos solo son pinceladas de la triste realidad de los comerciantes que son afectados por los racionamientos del importante suministro y perjudicados por la incapacidad de las autoridades.
Incluso la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) el pasado lunes estableció un calendario en el que se indica en qué zonas se iría la energía, pero en Juticalpa ni eso respetaron: la luz se va todos los días y en cualquier momento.
Los más de 200 comercios en esta zona de Honduras tienen pérdidas de hasta un millón de lempiras cada semana, lo que representaría cuatro millones por mes, según los registros de los comerciantes.
Olancho es el cuarto departamento del país más afectado por los apagones de energía, de acuerdo con un informe de la Asociación para Sociedad más Justa
“La presidenta Castro no nos da respuesta ni ayuda”
El alcalde de Juticalpa, Olancho, Walner Castro, tiene claro que como la principal autoridad del municipio debe brindar soluciones.
Pero también es objetivo al decir que es muy difícil hacerlo con una Presidenta que no les ayuda ni les da respuesta, y peor cuando no cuentan con los fondos que por ley debe recibir su alcaldía.“Claro que he hablado con la gente y ellos me cuentan, es muy lamentable lo que está pasando en Juticalpa”, dijo el edil.
“La Presidenta ya sabe de esta situación, pero no nos da respuesta”, agregó. La zona central de Juticalpa es de la más afectadas y aunque la hidroeléctrica Patuca III los puede abastecer de energía, sucede lo contrario.
“Solo queda esperar que el gobierno pueda solventar estar situación y que la gente pueda volver a levantarse porque todo está muy mal”, expresó.
