TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha alertado este viernes 3 de mayo, en el Día de la Libertad de Prensa, sobre la creciente amenaza que representan las autoridades políticas para la libertad de prensa a nivel mundial.
Según su última Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, el aspecto político, uno de los cinco indicadores evaluados, ha experimentado el mayor descenso global en el último año.
RSF señala que en la actualidad existe un deterioro en el apoyo y el respeto a la autonomía de los medios, así como un aumento de las presiones ejercidas por el Estado y otros actores políticos sobre los medios.
El documento publicado por RSF destaca eventos como la guerra en la Franja de Gaza y la invasión rusa de Ucrania, como ejemplos de esta tendencia negativa.
Además, la ONG subraya el elevado número de elecciones celebradas en todo el mundo en los últimos años, lo que ha llevado a la llegada al poder de líderes que no respetan la libertad de prensa, como en el caso de Argentina.
También señala cómo algunos países, como Turquía, China y Vietnam, controlan la información a través de las redes sociales y restringen la labor de los periodistas. Otros países tratan de controlar la información a través de las redes sociales y, para ello, llevan a prisión a periodistas por publicar noticias a través de esta vía, restringen el acceso a las plataformas o, directamente, borran contenido en ellas.
Por otro lado, algunas formaciones políticas “alimentan el odio y la desconfianza hacia los periodistas”, e incluso llegan a orquestar “maniobras de control del ecosistema mediático”, como el caso de Italia, donde un diputado de la mayoría parlamentaria está tratando de hacerse con la segunda agencia de noticias más importante del país, según denuncia la organización.
La clasificación destaca a los países escandinavos como líderes en libertad de prensa, mientras que países como Afganistán, Siria y Eritrea ocupan los últimos puestos debido a la represión continua contra los medios. Venezuela también se sitúa en la parte de baja de la clasificación.
En el caso de Latinoamérica, en México, aunque ha sido históricamente un país peligroso para los periodistas, ha experimentado una ligera disminución en el número de asesinatos en comparación con años anteriores.