Honduras

Extenso verano acaba con los ríos y quebradas del sur

FOTOGALERÍA
19.04.2016

Los problemas con el abastecimiento de agua en el municipio de San Marcos de Colón se han recrudecido en los últimos dos meses.

Los extensos bosques de pino y las vertientes que caracterizan a la comunidad están en peligro de extinción, lo que ha provocado una prolongada sequía en el sector.

Este año ha sido uno de los períodos más secos que les ha tocado experimentar a los habitantes del municipio, debido a la poca agua que almacena el río Comalí.

“Los problemas de agua en verano siempre han estado presentes, pero como este año, nunca, los ciudadanos nos hemos visto en la necesidad de comprar el líquido para realizar las labores del hogar”, declaró Ana Patricia Girón, vecina de la zona.

Doña Ana reside en el barrio El Cafetal, y relató que cada tres semanas tiene que desembolsar unos 400 lempiras para comprar agua.

“Es un duro golpe al bolsillo, uno se prepara con un presupuesto para la quincena y este se ve trastocado ante la necesidad de comprar el agua que antes recibíamos en nuestras casas”, lamentó.

Y es que el municipio de San Marcos de Colón, debido a su geografía y condición climática, no había llegado a padecer por sequía, el servicio pasó de llegar hasta cuatro días seguidos a uno solo.

En el municipio habitan 30,000 personas, de las cuales 17,500 se abastecen de agua a través del río Comalí. Ignacio Valladares, encargado del Servicio Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), aseguró que ante la falta de agua se han visto en la necesidad de reducir el bombeo de 16 horas continuas a seis.

La bomba de la institución tiene una capacidad mínima de 400 galones por minuto, los cuales son almacenados en al menos seis tanques. En la temporada normal, se podría llegar a recaudar unos 2,400 galones, pero ante la carencia del líquido se debe enviar de manera expedita a los usuarios.

“Estamos trabajando a todo lo que da, haciendo lo necesario para que la poca agua que captamos llegue a la población que la necesita por lo menos una vez a la semana”, estimó.

Disminución de caudal
La situación que a traviesa el municipio de San Marcos de Colón se replica en Choluteca, donde el río con el mismo nombre ha bajado su caudal en al menos un 30 por ciento.

La crisis, que desde hace varios meses había avizorado Aguas de Choluteca, se complicó, por lo que se trabaja en la creación de un rol de racionamientos, los cuales serán inevitables en la zona. Rómulo Vivas, técnico del departamento de producción en Aguas de Choluteca, lamentó que sumado al proceso normal de evaporización del agua del río, las empresas agroindustriales acaben con el caudal.

“En las inspecciones que hemos realizado se ha detectado que las empresas han instalado inmensas bombas para extraer el líquido y utilizarlo en el riego de sus cultivos, los que pone en riesgo el suministro de agua a las viviendas”, recalcó.

En el caso de Choluteca, la institución encargada de suministrar el líquido registra 13,500 abonados, los cuales además del río son abastecidos por pozos, que también han reducido su caudal.

La sequía se ha extendido al municipio de Nacaome, en el departamento de Valle, donde ante la falta de agua, las autoridades locales se vieron en la obligación de perforar tres pozos de los cuales dos se pondrán a operar.

En la ejecución de la iniciativa se invirtieron 700 mil lempiras y se espera que para mediados del año puedan contribuir a solventar la crisis de agua