El Ministerio de Defensa movilizó al Golfo de Fonseca dos embarcaciones con tecnología de punta recientemente compradas a Holanda con la finalidad de interceptar operaciones ilícitas del narcotráfico.
Las dos barcazas -que tienen una extensión de 36 metros y una velocidad de 40 nudos por hora- fueron trasladadas de Puerto Cortés en contenedores del Comando de Apoyo Logístico de las Fuerzas Armadas (Calffa), informó a EL HERALDO el contralmirante Rigoberto Espinoza, comandante general de la Base Naval Hondureña.
El pasado 28 de agosto, la corbeta Lempira (tipo Damen Stan Patrol Spa 4207) atracó en la Base Naval de Puerto Castilla.
Además, llegaron seis lanchas interceptoras Damen Interceptor DI-1102, que se construyeron en los astilleros de la compañía B.V Scheepswerf Damen Gorinchem en los Países Bajos.
Cabe destacar que la Secretaría de Defensa Nacional destinó en su presupuesto de 2013 una partida de 3,651,000 dólares como primer abono por el alquiler de las unidades navales.
El Congreso Nacional aprobó en una sesión privada en octubre de 2012 el contrato de arrendamiento de esta flota para la Fuerza Naval de Honduras por 62 millones de dólares, con opción a compra después de 18 años.
El contrato se suscribió con la empresa de origen holandés Servicios Marítimos Internacionales, S.A.
Espinoza dijo que las guardacostas harán operaciones rutinarias, día y noche, por el Golfo de Fonseca, por todas las aguas jurisdiccionales.
Dijo tener la esperanza de que el trasiego de drogas se va a reducir con la presencia de estas modernas embarcaciones que también servirán para cuidar el ecosistema.
Los pescadores hondureños se quejan que productos marinos y los mismos manglares generalmente son objeto de robo por desconocidos.
¿Mensaje a El Salvador?
El traslado de las barcazas al Golfo de Fonseca se produce en momentos en que las autoridades salvadoreñas están incómodas con Honduras por haber ejercido soberanía con el izado de su bandera en la Isla Conejo.
El 1 de septiembre las autoridades hondureñas izaron la bandera sobre la cima de la pequeña isla.
Este acto provocó la indignación por parte del vecino país, que mandó una nota de protesta a la cancillería hondureña.
El comandante de la Fuerza Naval declaró a EL HERALDO que el envío de las guardacostas no lleva ningún mensaje para el país vecino.
“Ellos tienen embarcaciones similares”, dijo el contralmirante para enseguida añadir: “No es ningún mensaje, ellos tienen ese tipo de embarcaciones y nosotros lo que estamos haciendo es ejerciendo nuestro derecho de mejorar nuestra presencia en el Golfo de Fonseca”.
“Nosotros nunca hemos pensado que se va poner tenso por la isla Conejo. La isla conejo es un tema juzgado”, expresó.
Se le consultó si las guardacostas serán utilizadas para resguardar la isla Conejo.
“No necesitamos ir a Conejo porque tenemos presencia permanente y una embarcación permanente, isla Conejo para nosotros es históricamente nuestra, es nuestra”, dijo Espinoza.
“Los amigos de El Salvador nunca han molestado en esa isla y ellos mejor que nosotros saben que tienen su apostadero naval en la isla Martín Pérez y nos hemos visto como hermanos y no creo yo que esto venga a crear un resquemor entre nosotros porque somos más que todo amigos”.
La posesión de la isla Conejo nunca fue parte de la controversia que Honduras y El Salvador ventilaron entre 1986 y 1992 en la Corte Internacional de Justicia de la Haya.
Honduras, incluso antes de la controversia limítrofe, siempre ejerció soberanía sobre la referida isla y nunca El Salvador -que próximamente estará en elecciones- protestó como lo hizo recientemente.
Fue curioso escuchar al presidente Francisco Funes decir que la isla “nunca ha estado en disputa, siempre El Salvador ha ejercido soberanía. Quien ha intentado dar una versión diferente ha sido el gobierno de Honduras”.
“Les puedo garantizar que nosotros no estamos pensando en soluciones de fuerza, ya no estamos en los tiempos en que los conflictos territoriales o de límites se resuelven por la vía de las armas”, dijo Funes haciendo alusión a un posible conflicto con Honduras por la disputa de una isla.
Las declaraciones de las autoridades salvadoreñas fueron desmentidas de inmediato por el gobierno hondureño, tanto a través de un comunicado como de boca del propio presidente Porfirio Lobo Sosa.
“No entiendo en realidad qué es lo que pasa, pues en lo que tengo de gobernar el país, siempre el 1 de septiembre se iza la bandera en la isla Conejo, es más, existe una unidad de la Fuerza Naval de manera permanente desde 1969”, dijo Lobo Sosa.
“Esto no es nada nuevo, cada 1 de septiembre siempre se iza la Bandera Nacional en la isla Conejo, que pertenece a Honduras”.
En junio pasado, el presidente de Honduras Porfirio Lobo denunció la presencia de un acorazado nicaragüense en el Golfo de Fonseca que impedía que los pescadores nacionales salieran a faenar.
Según una investigación de EL HERALDO, la Fuerza Naval hondureña tiene una limitada presencia en la zona, por lo que se espera que con las dos naves se le brinde protección a los pescadores artesanales que denuncian constantes agresiones de parte de las autoridades de Nicaragua.
'No tengo que levantar los F-15 para que me abran paso', ha declarado el presidente hondureño, en una muestra de las tensiones existentes en el Golfo de Fonseca que comparten Honduras, El Salvador y Nicaragua.