TEGUCIGLPA, HONDURAS.- La epidemia del dengue está dejando una persona muerta cada semana de este 2024 en Honduras y ahora amenaza el sistema escolar público en el inicio del año lectivo.
La preocupación entre directores, personal docente y padres de familia y la misma población estudiantil es latente y antes de que el vector transmisor haga estragos en sus salones de clases, claman por medidas de prevención.
Cerrar las aulas temporalmente o clases virtuales quedaron descartados como opciones para evitar que los escolares sean afectados argumentan las autoridades sanitarias ya que el Aedes aegyptis también amenaza en sus viviendas y en cualquier área pública.
“No se pueden paralizar las clases porque el dengue no se pasa de persona a persona como el covid, el dengue es a través de la picadura del mosquito y más que todo es en la casa y lugares donde hay agua estancada”, analizó Helga Codina, expresidenta del Colegio Médico de Honduras (CMH).
Intervención
La mayoría de centros educativos del país abrieron sus puertas al año escolar el pasado lunes, y con esto también se abrió la puerta al dengue ya que arrastran los mismo problemas año tras año: falta de agua, aguas negras estancadas y una crecida maleza, dejando un ambiente cómodo para la reproducción del vector.
“Mire en esta escuela la mayoría del tiempo no hay agua, la basura se acumula, los niños ni en los baños tienen agua; el gobierno tiene que hacer algo, dar agua y dar servicio de limpieza”, clamó Maribel Paz, madre de familia de la escuela pública Meneca Mencía, ubicada en la colonia Cruz Roja, al sur de la capital.
La directora de este centro educativo, Miriam Cruz, explicó que lo más correcto es que el gobierno intervenga ante esta amenaza, realizando limpieza y proporcionando agua.
El doctor y epimediólogo Kenneth Rodríguez concuerda con la exigencia de los padres de familia y directores.
“La misión primordial es evitar los criaderos de zancudos. Los estudiantes pueden ser agentes de cambio, es decir hacer obras de limpieza tanto en el hogar como en la escuela”, apuntó Rodríguez.
Varios directores, padres y hasta el CMH solicitaron que las escuelas y comunidades sean intervenidas con fumigación, y otras actividades de limpieza para evitar que esto sea un golpe al año lectivo.
También instaron a la Secretaría de Salud (Sesal) a actuar diligentemente, no como en San Pedro Sula, epicentro de esta afección, que a falta de que el sistema sanitario respondiera, la alcaldía tuvo que intervenir 150 escuelas.
Datos oficiales reportan que en los últimos 10 años, 117 niños han muerto a causa del dengue. La cifra se vuelve una advertencia y refuerza la solicitud de escuelas al Gobierno.
Hasta la primera semana de febrero, se detectaron casi 800 casos sospechosos de dengue en el país, de estos 30 casos son graves. Francisco Morazán y Cortés son el epicentro de las afectaciones por dengue.