TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El periodista deportivo Walter Urbina murió en el Hospital Escuela de Tegucigalpa, capital de Honduras, debido a un paro cardíaco.
Urbina fue trasladado desde el Centro Penitenciario de Támara, en el valle de Amarateca, zona central de Honduras, pero lamentablemente no logró sobrevivir, según confirmó el coronel Ramiro Muñóz de la Policía Militar del Orden Público (PMOP).
Urbina cumplía una condena de 17 años de prisión por la muerte del también periodista Arístides Soto en el 2001.
El periodista deportivo fue capturado en 2003 y tras un proceso judicial que incluyó sentencias absolutorias y posteriormente condenatorias, fue enviado a cumplir su pena en la cárcel de Támara.
El caso
En 2001, el cronista deportivo Aristides Soto fue encontrado muerto con signos de tortura en el sótano de un hotel de San Pedro Sula, momentos antes de cubrir un juego eliminatorio entre Honduras y Trinidad y Tobago para el Mundial Corea y Japón 2002.
Dos años después, en 2003, Walter Urbina fue capturado en cumplimiento a una orden de captura emitida por el Juzgado de Letras III de lo Criminal, en relación con el caso del asesinato de Aristides Soto.
En 2005, tras dos años de proceso judicial, los juzgados emitieron una sentencia absolutoria que benefició tanto a Walter Urbina como al locutor Edgardo Zúniga, quienes fueron acusados del homicidio de Aristides Soto. Sin embargo, la Fiscalía anunció que apelaría esta decisión.
Dos años después, en 2007, una Corte de Apelaciones de San Pedro Sula revocó la medida anterior y condenó a ambos imputados a 17 años de cárcel por el crimen.
Ante esta situación, Urbina y Zúniga interpusieron un recurso de casación. Como parte de las medidas cautelares mientras se resolvía este recurso, se les ordenó presentarse a firmar cada semana en los juzgados.
En 2009, la Corte Suprema de Justicia falló a favor de la parte acusadora y dejó en firme la sentencia de 17 años de cárcel para Walter Urbina y Edgardo Zúniga. La defensa de ambos interpuso un recurso de revisión.
En 2017, un Juzgado de Ejecución Penal de San Pedro Sula emitió una orden de captura contra Urbina.
El 8 de mayo de ese mismo año, agentes de la Dirección de la Policía de Investigación (DPI) ejecutaron la orden de captura y arrestaron a Urbina en su residencia en la colonia Cerro Grande de Tegucigalpa.
Posteriormente, Urbina fue trasladado a San Pedro Sula para ser presentado ante los juzgados competentes, ya que el proceso penal estaba siendo manejado por el Juzgado de Letras III de lo Criminal de esa ciudad, donde se determinó enviar a Urbina a la cárcel de Támara, en el valle de Amarateca, zona central de Honduras siguiendo la recomendación de su defensa.