TOCOA, HONDURAS.- Cinco días llevan sin laborar unos mil empleados de tres fincas bananeras invadidas en el sector de Isletas, Sonaguera, Colón.
La situación pone en riesgo sus trabajos ya que los ejecutivos de la Empresa Agrícola Santa Inés están a punto de cerrar estas fuentes de trabajo si el gobierno no garantiza la seguridad jurídica.
A finales de septiembre, grupos de supuestos campesinos invadieron unas 2,450 hectáreas de fincas bananeras en Sabá, Colón, sin embargo el 3 de octubre fueron desalojados pacíficamente por la Policía Nacional y el ejército, tras la orden de un juez.
El pasado lunes, de nuevo volvieron a invadir otras propiedades en otro sector. Las fincas que están actualmente invadidas son Guanacaste, La Paz y La Esperanza, en Isletas.
Los campesinos también están recolectando la fruta generando numerosas pérdidas a la Empresa Agrícola Santa Inés.
“Estamos sin laborar en las fincas, es preocupante porque no miramos una respuesta del gobierno de lo que está pasando en Isletas, no le han dado importancia”, apuntó Alirio Garay, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Agrícola Santa Inés (Sitraeasisa).
Mediante un comunicado, la junta directiva del Sitraeasisa amenazó con tomarse la carretera CA-13 en el Bajo Aguán si el gobierno no promueve el diálogo para llegar a un acuerdo.
La medida se da ya que los ejecutivos de la empresa están a punto de despedir a unos mil trabajadores si no desalojan a los invasores.