TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El discurso de la presidenta Xiomara Castro en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) ha generado eco a nivel nacional e internacional.
Durante 19 minutos, la mandataria denunció un boicot en contra de su gobierno y abogó por el desbloqueo a Venezuela, Cuba y Nicaragua; así como el cese a la guerra de Ucrania y Rusia.
La defensa para Nicaragua desató la indignación de exiliados de ese país, regidos por la dictadura de Daniel Ortega que ha ido de frente ante sus opositores, iglesias y comunicadores.
Una de las críticas hacia lo dicho por Castro fue por parte de Arturo McFields Yescas, íntimo de Daniel Ortega en su momento y, siendo funcionario designado por Ortega, se atrevió a denunciar la situación de su país de manera pública.
En 2022, McField era el embajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y calificó de dictadura lo hecho por Ortega lamentando “la falta de libertades, las decenas de presos políticos y los poderes fácticos”.
“Denunciar la dictadura de mi país no es fácil, pero seguir guardando silencio y defender lo indefendible es imposible”, afirmó McFields en una intervención ante el Consejo Permanente de la OEA en marzo de 2022.
Tras el discurso de este 20 de septiembre por parte de Xiomara Castro, el ahora exiliado de su país por el régimen Ortega señaló fuertemente a Castro por defender la dictadura nicaragüense.
“Presidente de Honduras Xiomara Castro vuelve a ser la abogada del diablo defendiendo crímenes de las dictaduras de Cuba, Nicaragua y Venezuela. Aclaramos las sanciones no son contra Nicaragua sino contra funcionarios específicos que han cometido actos de corrupción y violaciones a derechos humanos”, dijo McFields.
El exdiplomático de Nicaragua también había lamentado la defensa de Castro en una reciente Cumbre realizada en Cuba al considerar que “creo que doña Xiomara ha sufrido daño cerebral severo. En Nicaragua no existe ningún bloqueo, lo que existe es un dictador cobarde que encarcela sacerdotes”.