SEÚL, COREA DEL SUR.-Corea del Norte disparó el lunes dos misiles balísticos de corto alcance, el más reciente en su oleada de pruebas armamentistas de las últimas semanas, informaron las fuerzas armadas surcoreanas.
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“Nuestras fuerzas armadas detectaron dos misiles balísticos de corto alcance disparados desde la zona de Junghwa en la provincia de Hwanghae del Norte a las 07H47 (22H47 GMT) en dirección” al Mar de Japón, indicó el Estado Mayor Conjunto (EMC) de Seúl en un comunicado.
Misiles volaron unos 370 kilómetros cada uno, y su lanzamiento fue un “grave acto de provocación que dañan la paz y la estabilidad de la comunidad internacional y la península coreana”, agregó el EMC.
El ministerio japonés de Defensa también confirmó el lanzamiento. La prensa japonesa citó a autoridades diciendo que ambos misiles volaron en una trayectoria irregular antes de caer fuera de su zona de exclusión económica.
El lanzamiento ocurrió después de que Seúl y Washington culminaron el jueves sus mayores ejercicios militares conjuntos en cinco años, y en momentos que esas dos fuerzas armadas realizan un simulacro de aterrizaje anfibio.
Pyongyang considera que tales maniobras son el ensayo de una invasión, y el viernes declaró que los recientes ejercicios, denominados Escudo de Libertad, fueron un entrenamiento para “ocupar” Corea del Norte.
La prensa estatal norcoreana publicó la semana pasada que los ejercicios militares de Estados Unidos y Corea del Sur exigen “disuasores de guerra más fuertes”, incluyendo una “capacidad de ataque nuclear multifacética y ofensiva”.
Pyongyang realizó sus propios ejercicios militares, incluidos el segundo lanzamiento del año de un misil balístico intercontinental y la prueba de un dron submarino de ataque nuclear.
- “Alertar al enemigo” -
Analistas dijeron previamente que Corea del Norte podría utilizar esos ejercicios como excusa para lanzar más misiles y quizás incluso un ensayo nuclear.
La prensa estatal norcoreana dijo el viernes que la prueba del “dron submarino de ataque nuclear”, supervisada personalmente por el líder Kim Jong Un, fue realizada para “alertar al enemigo de una verdadera crisis nuclear”.
La misión del dron es “infiltrarse sigilosamente en aguas operacionales y provocar un tsunami radioactivo de gran escala (...) para destruir flotas ofensivas e importantes puertos operativos del enemigo”, informó la agencia noticiosa oficial KCNA.
La agencia también indicó el miércoles pasado que Pyongyang disparó misiles crucero estratégicos “equipados con una ojiva de prueba que simulaba una ojiva nuclear”.
Analistas cuestionan las afirmaciones norcoreanas al señalar que no tuvieron demostraciones creíbles de capacidad.
Pero agregaron que Pyongyang está avanzando desde simplemente almacenar ojivas nucleares a intentar la diversificación de sus medios de lanzamiento.
Tras un año récord de pruebas de armas y crecientes amenazas nucleares de Pyongyang en 2022, Seúl y Washington intensificaron su cooperación de seguridad.
Las acciones norcoreanas también llevaron a Corea del Sur y Japón a enmendar sus relaciones, tensas por disputas históricas, con miras estrechar su cooperación en seguridad.
Corea del Norte se proclamó el año pasado una potencia nuclear “irreversible” y el líder Kim pidió recientemente un aumento “exponencial” en la producción de armas, incluyendo las de tipo nuclear táctico.
Kim también ordenó semanas atrás a las fuerzas armadas de su país intensificar los preparativos para una “guerra real”.