LA HABANA, CUBA.- Una nueva crisis alimentaria atraviesa Cuba luego que le pidiera ayuda de manera “urgente” al Programa Mundial de Alimentos (PMA) para facilitar leche a los menores de siete años.
Aunque esta no es la primera vez que la isla del Caribe atraviesa una situación de crisis como esta, nunca antes había hecho una solicitud de ayuda a las Naciones Unidas (ONU), lo que ha encendido las alarmas.
Hasta el momento el gobierno de Miguel Díaz-Canel no se ha pronunciado públicamente sobre su petición y fue una delegación del PMA la que informó sobre la “comunicación oficial del Gobierno” que se recibió. La organización ya habría tomado cartas en el asunto y ya inició el envío de leche en polvo a la isla para que sea distribuida.
En la información obtenida por el PMA, el gobierno cubano pidió ayuda “para continuar la entrega mensual de un kilogramo de leche destinada a niñas y niños menores de siete años en todo el país”.
El organismo, reveló que la situación de escasez que enfrentan los cubanos está impactando “significativamente en la seguridad alimentaria y nutricional de la población (...) Es la primera vez que Cuba solicita apoyo emitiendo una comunicación oficial al más alto nivel de dirección del PMA”.
La petición de Cuba se hizo a finales de 2023, cuando el Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera (Mincex) envió la carta al PMA en Roma.
Se conoció que el PMA ya ha enviado a la isla 144 toneladas métricas de leche en polvo descremada que beneficiarán a casi 48 mil menores entre siete meses y tres años en Pinar del Río y La Habana.
Sin abastecimiento
La crisis alimentaria en Cuba se ha ido agudizando en los últimos años debido a los retrasos o ausencia total del producto lácteo en la dieta que el gobierno distribuye a través de las llamadas libretas de abastecimiento. El producto sólo era distribuido a los menores de siete años y las personas con dietas especiales por enfermedades crónicas.
En 2021 las autoridades informaron que no contaban con el abastecimiento por atrasos en la importación, la poca disponibilidad de financiamiento y de barcos que puedan trasladar los cargamentos de leche. En más de una ocasión, la entrega de leche se ha substituido por sirope o refresco instantáneo vitaminado.
A finales de 2023, los ministros de Economía y Energía y Minas comparecieron en la televisión estatal donde informaron sobre el poco dinero que cuenta el país para comprar alimentos en el exterior y para garantizar el suministro de energía.
En febrero de este año, Betsy Díaz Rodríguez, ministra de Comercio Interior (Mincin), reconoció que se enfrentaban dificultades para adquirir leche en polvo en el exterior por lo que informó que se buscaban alternativas para garantizar su distribución para los niños de cero a siete años.
La funcionaria atribuyó los problemas en la producción de leche por la sequía que impacta a la industria de la ganadería y los desvíos de leche hacia otros destinos.
En ese mismo mes, la isla recibió ayuda de leche en polvo, arroz, maíz y harina desde Brasil como parte de un inicio de cooperación entre el país sudamericano, Emiratos Árabes Unidos y Cuba.
Escasez de pan
La leche no sería el único problema alimenticio que existe en Cuba, y es que pan también sería uno de los productos que no está llegando a la mesa de los cubanos.
Según informó Granma, el órgano oficial del Partido Comunista (PCC), hay “restricciones financieras y logísticas que han retrasado el arribo al país del trigo para la producción de la harina”.
A la crisis se debe sumar el aumento del precio del combustible en más del 400%, así como un incremento en la tarifa del servicio eléctrico de un 25%. El gobierno aseguró que este impacto obedece al aumento del precio internacional del crudo debido a los “conflictos armamentísticos en el mundo”.
