Hoy metemos la nariz en el peliagudo mundo de la ciencia médica sin creernos iluminados expertos ni el remedio para el aprieto que se vive en todos los escuálidos hospitales del país, en cuyos pasillos, sillas o camillas, se mueren los infectados por la mortal peste. Irónicamente, el número de enfermos sube de forma alarmante ante la calamidad y el desafío.
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Su personal, igual, se muere, se harta del cansancio o sufre serios problemas psicológicos atendiendo los pacientes y a enormes filas de afectados por el coronavirus. Para rematar, los “hospitales móviles” pagados por Invest-H siguen en el limbo y, aquí, hacen parapetos para “instalarlos”. Improvisación total en medio de la anarquía, pero “el culpable soy yo”.
Aviesos
Salvajes opinan del tema clínico y más cuando surge sinfín de “salvadores” en medio de la mortandad y el caótico camino para el partido gobernante de curar a medias lo que todos, sin excepción, juran arreglar cuando en campaña electoral saltan mansos y sanan todo por el sillón. Nadie nos venga con cuentos viejos. Todo es una pesadilla.
El 95%de doctores “odia” que una pedagoga sea la titular de Salud, pero frente a ella parecen cubos de hielo en el desierto. |
¿Nuevas plazas para qué? Muchos médicos, en donde sea, tienen conectes políticos o son versados en meter zancadillas a nuevas proles. ¿Mentimos? En cada gremio existen envidias. Al final, nadie acepta que pasó por la universidad y apenas logra un poco de práctica se cree redentor de los pueblos. Ya vieron, la pandemia acaba con la altivez de cerebros vacíos.
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Mauricio Oliva anunció en su cuenta de Twitter que el Congreso Nacional aprobó una ley para que los egresados de la Escuela de Medicina, sin urgir de su título, sean contratados por la Secretaría de Salud y, así atender, donde sea, la pila de infectados. Empero, lo que ignora Oliva, al menos eso intuimos, es que cúpulas de esa Facultad están llenas de fieras y reptiles.
Virgen
El 95% de doctores “odia” que una pedagoga sea la titular de Salud, pero frente a ella parecen cubos de hielo en el desierto. Así la doblez de los mismos cada cuatro años. Según el sapo así es la pedrada. Cada grupo tiene sus deleites y sus piques. Generalmente, la torta es grande pero no es para todos, ¿verdad Suyapa?
Todos cacarean, “arreglando” la crisis en burós, en aburridos foros televisuales o radiales y nadie integra, aunque sea para hacer pruebas del covid-19, a unos 200 futuros médicos, burlados en sus casas esperando realizar o terminar su ansiado internado. ¿Cuándo les cumplirán señor Decano? ¿Aló, Dennis Figueroa?
¿Por qué callan su torpeza? ¿Es falta de insumos, de dinero o no anexan nuevos brillos por egoísmo o por celos? Dejen las quejas, pónganse a trabajar, ah, y ya no pregunten más por “El Tigre”, si ustedes son más fieras. Hablan de escasez para sanar siendo insanos.
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