Ante el abuso denunciado, la Alcaldía Municipal inspeccionará la próxima semana varias colonias cerradas recientemente con Barrios más Seguros, para verificar que con la medida no se restrinja la libre circulación.
Aunque no especificó una fecha, el alcalde capitalino Ricardo Álvarez confirmó que “mi equipo sí puede verlo (la situación de las zonas conflictivas), y será la otra semana”.
Sectores como El Prado, San Ángel y residencial Plaza instalaron una serie de portones para evitar el ingreso de delincuentes, lo que ha desatado una polémica entre los principios de la vida y la libre locomoción.
Los promotores se defienden que es la única alternativa para frenar la espiral de violencia que no solo abate a los barrios marginales.
Por su parte, los opositores sostienen que el programa municipal se ha degenerado, al conceder permisos en calles consideradas como vías de alivio, lo que va en contra del espíritu del reglamento.
Sin embargo, no importa el grado de polémica, pues mientras la inseguridad se extienda, más adeptos tendrá el programa municipal.
Y la prueba irrefutable es que en la Alcaldía están en evaluación otras 80 solicitudes de Barrios más Seguros, según informó Álvarez.
Desde su aprobación en noviembre de 2011, los circuitos cerrados han llegado a 255 sectores de la ciudad, con la instalación de 465 portones metálicos, según la comuna.
Además, los capitalinos han invertido, detalla la municipalidad, unos 21 millones de lempiras en el blindaje de sus comunidades.
Los ciudadanos adscritos al programa edilicio cancelan unos 6.5 millones de lempiras mensualmente en el pago de seguridad privada, pormenorizó el jefe municipal.
A pesar de la incomodidad de los conductores, el edil expresó que en los circuitos cerrados “se ha reducido casi a cero las violaciones, secuestros, muertes y robos”.
En ese sentido, indicó que “el beneficio de estos contra la incomodidad de algunos no tiene precio (...), si tengo que elegir entre la vida y la oportunidad que alguien tenga que dar la vuelta a otro lado, efectivamente preferiremos la vida”.
Por su parte, el Observatorio de Violencia argumenta que la lucha contra el crimen se debe librar en todo el municipio.