Las reservas de unidades sanguíneas solo ajustan para la demanda del día, lo que significa que en una eventual emergencia, la situación sería lamentable.
Preocupadas por esta realidad, las autoridades de la Cruz Roja Hondureña, voluntarios y otras organizaciones afines marcharon recientemente en la capital para motivar una cultura de donación entre los capitalinos.
Y es que en la capital apenas se recaudan 60 pintas diarias, lo que representa apenas la mitad de las que deberían ingresar al banco de sangre.
De los 80 países del mundo con un bajo índice de donaciones de sangre (menos de 10 donaciones por cada 1,000 personas), 79 son naciones en desarrollo y entre ellas está Honduras.
“Yo le digo a los muchachos que se animen, que hay muchos prejuicios sobre la donación, que ni siquiera duele, no engorda y la sangre que se dona no se pierde, se renueva cada dos horas”, explicó Elizabeth Vinelli, directora del programa de sangre de la Cruz Roja.
Concienciación
Los miembros de la benemérita institución decidieron salir a las calles en búsqueda de donantes activos, pues el banco de sangre, en dos ocasiones, ha presentado un inusual desabastecimiento.
La marcha también conmemoró el Día del Donante, una fecha dedicada a los héroes que con su sangre salvan vidas.
El recorrido se realizó desde las instalaciones de la corporación Dinant y finalizó frente a las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
El objetivo más claro de la marcha fue motivar a más personas a que se hagan donantes.
Vinelli dijo que la Organización Mundial de la Salud reconoce el día dedicado a los millones de personas que, al donar sangre, salvan vidas y mejoran la salud del prójimo.
“Esta marcha pone de relieve la importancia de donar sangre periódicamente para prevenir la escasez en hospitales y clínicas, sobre todo en los países en desarrollo, donde las reservas son limitadas”, expresó.