Un nuevo año de existencia festejó el Servicio Nacional de Acueductos y Alcantarillado (SANAA), sin embargo, la tan ansiada mejora del suministro continúa a la espera.
La brecha entre los capitalinos que no tienen acceso al vital líquido y los que aún compran y acarrean el agua solo se ha logrado reducir en un 12 por ciento, reconoció el subgerente del SANAA, Ricardo Velásquez.
Con el programa Barrios en Desarrollo se han conectado 6,000 familias a la red de distribución de agua potable y alcantarillado. Pero en la ciudad unas 50,000 familias, diseminadas en 87 barrios y colonias, aún ven como un sueño tener el servicio.
“En mayo de este año adjudicaremos los proyectos del Transvase de agua de la represa Los Laureles a La Concepción y las presas inflables de ambos embalses”, detalló.
Según Velásquez, este año se concretarán muchos de los proyectos en cartera y a mediados de 2013 se brindará un mejor servicio.