Paralizados siete proyectos de más de 2,200 viviendas sociales por la UCP
Miles de familias sufren porque tienen más de dos años de estar esperando por sus casas. Mientras tanto, no pueden escapar de las inundaciones
Los proyectos de vivienda que ejecuta la UCP están abandonados, descuidados y otros avanzan a medio vapor.
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TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Miles de familias duermen casi a la intemperie, bajo la lluvia y el sol, con la promesa del gobierno de darles una casa, pero los proyectos no avanzan, ya tienen varios meses de estar paralizados porque no les pagan a las empresas constructoras.
La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus visitó recientemente los siete proyectos habitacionales que se ejecutaban por medio de la Unidad Coordinadora de Proyectos (UCP), con fondos del fideicomiso del Sistema Tecnológico y Logístico para la Administración de los Derechos de Propiedad en la República de Honduras (Sitec) del Instituto de la Propiedad (IP).
Las obras se ejecutan en los departamentos de Yoro, Cortés, Santa Bárbara y Choluteca, siendo en total 2,221 casas para igual número de familias que habitan en zonas de alto riesgo y que resultaron afectadas por los fenómenos naturales Eta y Iota en el 2020.
Se agrega el caso del proyecto de Lomas del Diamante, al sur de la capital, donde se edificaron alrededor de 100 módulos de contenedores que hoy se caen a pedazos y las decenas de familias que fueron trasladadas a ese
lugar ruegan que las saquen.
Ahí mismo se tenía planificado construir más de 500 casas de bloque para mover a las personas que han invadido los terrenos, mismos que son reclamados por personas naturales que tienen antecedentes ancestrales
de propiedad, mientras en el gobierno anterior afirmaban que los predios eran públicos. El objetivo era construir, a través de concesiones privadas, el proyecto Residencial Morazán y vender casas.
Cabe recordar que los proyectos habitacionales ejecutados por medio de la UCP son para
atender a las familias afectadas por Eta y Iota, con una inversión que superaba los 1,200 millones de lempiras, pero hasta ahora muchos no se han terminado.
Las mismas familias damnificadas por los huracanes siguen sufriendo por las lluvias cada año. Según el reporte de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), más de 16,600 familias, integradas por 56,898 personas, resultaron afectadas en el último temporal lluvioso, precisamente en los departamentos donde se ejecutan los proyectos.
En las visitas que realizó el equipo de EL HERALDO Plus a las zonas se comprobó que hay proyectos abandonados, cubiertos completamente por la maleza, invadidos por animales, mientras que otros parecen desiertos, sin trabajadores y algunos siguen a medio vapor.
Los proyectos
Los complejos habitacionales en ejecución son Anexo Tulipanes, ubicado en Villanueva, Cortés, donde la inversión es de 144.8 millones de lempiras por la construcción de 324 módulos en condominios, establecen los datos de la UCP.
También está Residencial Los Prados, ubicado en Choloma, Cortés, con una inversión de 60.7 millones de lempiras, donde el compromiso era la edificación de 500 soluciones habitacionales en condominio, pero se redujo a 136 debido a que el contratista dijo que el precio ya no era rentable.
El tercer proyecto es El Mestizal, en el municipio de Olanchito, Yoro, con una inversión que supera los 135.8 millones de lempiras y el compromiso de la empresa contratada es entregar un total de 304 viviendas.
Siempre en Olanchito, Yoro, se ejecuta Residencial Dos Caminos, a un costo de 89.4 millones de lempiras por la
construcción de 200 viviendas. Según la UCP, ese proyecto se redujo por problemas ambientales debido a que se ubica cerca de fincas bananeras.
De igual forma, en El Progreso, Yoro, se edifica Residencial Itza, donde la inversión programada es de 223.5 millones de lempiras por 500 viviendas para entregarlas a las familias afectadas desde Eta y Iota.
En Macuelizo, Santa Bárbara, se avanza a medio vapor el levantamiento de la Comunidad San Francisco de Asís, con un costo de 130.6 millones de lempiras, donde deben entregar 290 viviendas y una iglesia. Mientras que en Choluteca, Choluteca, está el proyecto Residencial Hernández, donde ya se edificaron 467 viviendas, a un costo de 208.7 millones de lempiras, establecen los datos que proporcionó la UCP antes de comenzar el proceso de liquidación con el IP.
La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus comprobó que todos estos proyectos están paralizados o avanzan a medio vapor debido a que el gobierno y la UCP dejaron de hacer los desembolsos para terminarlos.
En Yoro
Los proyectos más descuidados y abandonados son los de Olanchito, en Yoro, donde el monte está por cubrir las casas, muchas ya completadas, otros quedaron a medio levantar y el descuido las está destruyendo.
Al llegar al proyecto Residencial Dos Caminos, a un costado de la carretera que de Olanchito conduce a La Ceiba, Atlántida, que es ejecutado por la Constructora Russell y Asociados S. de R.L. Esta obra debió ser entregada en agosto de 2022.
Un guardia de seguridad, que impidió el paso, indicó que desde hace unos seis meses las obras estaban paralizadas y que a ellos les debían alrededor de tres semanas de sueldo debido a que los ingenieros y el personal de construcción no han vuelto.
El equipo de EL HERALDO Plus se comunicó con uno de los ejecutivos de la constructora, quien autorizó la entrada y señaló que el proyecto se detuvo porque los fondos de la UCP pasaron a la Secretaría de Finanzas (Sefin) y desde entonces no se hacen desembolsos.
Al entrar se pudo ver que las casas que ya están terminadas se están deteriorando por la misma naturaleza, hay
pilas cubiertas de lama, las calles no se han terminado y muchas casas quedaron a medio construir.
Igual pasa en El Mestizal, ubicado más cerca del centro de Olanchito, que construye la misma empresa. Allí las vacas son las que pasean por en medio de las viviendas, que tampoco se terminaron de edificar en su totalidad.
El equipo de la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus fue delatado por “Tigreado”, un perrito con manchas como tigre que tiene como amo al guardia de seguridad a cargo, quien afirmó que por poco le dispara a los periodistas, ya que no le avisaron de su presencia.
El problema es que están llegando a saquear el proyecto, las personas se están llevando puertas, ventanas, material eléctrico, entre otras cosas que hallen, debido al abandono.
La seguridad debe portar armas de fuego para evitar más saqueos. En tanto, Fredy Tábora, ingeniero residente de Residencial Itza, en El Progreso, Yoro, a cargo de la constructora Servicios para el Desarrollo de la Construcción S. de R. L. de C.V. (Sedeco), afirmó que el proyecto se paralizó debido a la falta de fondos y por eso no tienen personal laborando, aunque mantienen labores de limpieza y vigilancia para evitar saqueos y deterioro.
El problema, al igual que en los demás, es que la Secretaría de Finanzas desembolsa los fondos de las viviendas que ya se terminaron y así no pueden continuar.
Son 222 casas que han sido intervenidas en esta zona, es decir que ya están edificadas, de las cuales 88 ya fueron finalizadas, solo a la espera de hacer ciertos detalles para entregarlas a la UCP, mientras que 58 ya están a nivel de cimentación.
La fecha de entrega de este proyecto era el 30 de septiembre de este año, pero ahora deben sentarse de nuevo con UCP para reprogramarlo y determinar los nuevos plazos.
Por medio de la solicitud de información número SOLSEFIN-2520-2023, Sefin aseguró que la Dirección General de Fideicomiso (DGF) no tiene información relacionada con fondos para la UCP, en todo caso debería responder el IP.
“Le pido al gobierno que no nos estén mintiendo”
Mientras desgranaba unas mazorcas para comer y vender lo que le quede y suplir otras necesidades de su hogar, la señora Odalma, Aracely Zelaya, vive en la indigencia y con la incertidumbre si le darán su vivienda que le prometieron.
“Con eso de las viviendas solo nos están engañando, algunas personas nos vienen a decir que esas casas son vendidas y que no las van a dar” lamentó la madre soltera, quien habita a la orilla de la calle del sector de Las Minas en Olanchito, Yoro.
Recordó que les dijeron que se las iban a entregar en diciembre del año pasado, luego que en septiembre, para el Día de la Madre también hicieron la bulla que las iban a dar, “pero no pasa nada, no dan nada”, dijo con la mirada perdida en la tierra que se hace lodo cuando llueve.
Lamentó que a pesar de que ella fue utilizada para promocionar el proyecto, en la última reunión que hubo de las personas beneficiadas, a ella no la llamaron, tuvo que ir a buscar a una de las abogadas encargadas para que no la dejarán por fuera.
La madre soltera expresó que “lo único que le pido a este gobierno es que nos ayuden, que nos apoyen y si en verdad nos van a dar las casas, que la den, pero que no nos estén mintiendo tanto”.
La misma situación viven otras familias que fueron afectadas por el fenómeno natural, Eta y Iota que habitan en ese lugar, como doña María Fúnez, quien habita con dos personas discapacitadas.
La señora vive en una chosita fabricada de pedazos de madera, tierra y una lámina que está llena de hoyos, alguna ha sido donada por la iglesia a la que ella asiste.
Al consultarle si espera algún día recibir la casa que le prometieron, externó, “Que sea la voluntad del Señor, hay que esperar en Dios, si es plan de Dios la voy a recibir, si no es plan de Dios, pues Dios lo sabe”.