BERLÍN, ALEMANIA.- Sin importar el tiempo ni la distancia, la comunidad de hondureños que se ha dispersado por los canales de Hamburgo, que ha traspasado la Puerta de Brandeburgo y que ha desafiado el invierno de Múnich, expone con orgullo el espíritu catracho a más de 9,200 kilómetros del suelo nacional.
Desde Isabel Bográn, una capitalina emprendedora que llegó en un intercambio en enero de este año y se ha radicado en Berlín, pasando por Luis Portillo, un joven becado del programa 20/20 que terminó su maestría y ahora busca dónde hacer su “internship”, una especie de puente entre la universidad y el mercado laboral, hasta la exitosa bióloga Laura Leiva, quien suma esfuerzos en la isla de Heligoland para proteger la vida marina de los océanos.
Y es que en las ciudades de Alemania se encuentran historias de catrachos de éxito que en medio del estudio o el trabajo buscan promover la cultura de su país cinco estrellas.
Hondureños en Hamburgo
La misión diplomática de Honduras en la nación europea registra más de 800 hondureños radicados que la hacen de embajadores, una colectividad hondureña desperdigada en el espacio geográfico, pero unida por la tecnología gracias a los grupos de WhatsApp y el Facebook. La más grande está en el norte, en Hamburgo, justo donde este año celebrarán el 198 aniversario de independencia patria.
En esta ciudad portuaria, una de las más urbanizadas de Europa y enriquecida con sus rutas comerciales, 135 catrachos reescriben su historia en el día a día: Elke Margarita Schumacher Romero vive desde hace dos décadas en esta urbe de 1.8 millones de habitantes y su liderazgo proactivo llevó a formar el grupo “Hondureños en Hamburgo” como una excusa perfecta para reunirse periódicamente y apoyarse.
“Extraño demasiado a Honduras, por eso formé un grupo de compatriotas en Hamburgo que nos reunimos cuatro veces al año… cada uno trae algo típico y formamos un gran bufete de comida hondureña para pasarla bien todos juntos”, comentó la profesional de la repostería de 43 años.
Celebran cumpleaños con piñatas, dulces y pastel y reviven la Navidad como si estuvieran en Honduras, con una cena familiar, regalos y abrazos… “eso sí, no hay cohetes en este país, ni uno solo. Es noche de paz”, cuenta a EL HERALDO, el medio referente del periodismo escrito hondureño que aprovechó una invitación del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores para contactar hondureños en Alemania.
Este 28 de septiembre, en el marco de la llegada de los Pliegos de Independencia patria, en el estado federado de Hamburgo, los connacionales encenderán la chispa de civismo, en medio de actividades culturales y tradiciones.
JóvenesHN
Mientras tanto, al noreste de Alemania las acciones de promoción cultural, cívicas y de hermandad están desde febrero pasado bajo la coordinación del grupo “JóvenesHN” en la capital Berlín.
El objetivo de su creación es que los hondureños se sientan orgullosos de su país y se apropien de su identidad nacional.
“Siempre buscamos un motivo para reunirnos y consentirnos con antojitos catrachos porque a mí también me hace falta mucho mi país. Nos rebuscamos en Berlín de insumos para hacer catrachitas, pastelitos de perro, pupusas y las baleadas que no pueden faltar”, agregó la embajadora de Honduras en Alemania, Christa Castro.
Y aunque las baleadas no saben igual, pues Alemania no tiene la variedad de mantequilla crema, rala, escurrida o especial que hay en Honduras, con un océano de por medio los muchachos quedan más que satisfechos con el típico platillo.
“JóvenesHN” nace como un brazo en Alemania del programa gubernamental Marca País, que en 2016 fundó “JóvenesHN” división Miami, Estados Unidos, para aglutinar a muchos catrachos por debajo de los 35 años que están fuera del territorio hondureño, ya sea estudiando o trabajando, que están muy identificados con el país y ejercen la labor de embajadores.
“En Berlín los chicos tratan de llevar amigos alemanes a las reuniones para llevar nuestra cultura de boca en boca, dar a conocer lo bonito y lo bueno que tiene Honduras y que a través de ellos se pueda hacer un balance más positivo de lo que de Honduras se dice o se conoce por estos rumbos”, dijo Castro.
Y mientras en la capital de Honduras los escolares rinden hoy un tributo a la tierra que los vio nacer con sus fervientes y coloridos desfiles, en suelo alemán la familia catracha arregla banderas, camisetas de Morazán, trajes y platos típicos y al latido patriota de sus corazones se pasan la voz por los grupos de chat: #NosvamosparaHamburgo a celebrar el 15...