TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La lucha contra el dengue se ha convertido en uno de los desafíos más críticos que ha tenido que enfrentar el sistema de salud; Honduras está a punto de alcanzar los 60,000 casos sospechosos de dengue.
Las acciones tardías por parte de la Secretaría de Salud (Sesal), el mal uso de los recursos médicos y la falta de trabajo con expertos han dejado como resultado unas 58,250 personas enfermas de dengue, señalan expertos.
Hasta el momento, junio se ha convertido en el mes más devastador, ya que el 47.60% de las personas se infectaron en este mes. De la semana epidemiológica 23 a la 26 se acumularon 27,727 casos; en cada semana las víctimas del mortal mosquito fueron en ascenso.
En la semana epidemiológica 23 se registraron 5,598 casos sospechosos de dengue, mientras que en la 24 la cifra aumentó a 5,680.
Sin embargo, el incremento fue más alto en la semana 25, con 8,187 casos. Finalmente, la semana 26 se reportó como la más catastrófica, con un total de 8,263 enfermos.
Regiones más afectadas
Tal y como se ha venido registrando en los meses anteriores, el Distrito Central, Cortés, Yoro y Santa Bárbara son las zonas más afectadas del país.
Durante la última semana de junio, Distrito Central registró 2,152 casos, el segundo lugar fue usurpado por Cortés, que reportó 764 casos de dengue.
De los 8,263 casos registrados durante la semana 26, unas 109 personas se encuentran luchando por su vida luego de recibir un diagnóstico de dengue grave.
Durante este año, unas 69 personas han perdido la lucha contra esta enfermedad, pero sólo 26 han sido confirmadas por el Comité de Mortalidad del Dengue.
Historias de sufrimiento
En los hospitales y centros de salud de todo el país, las escenas son desgarradoras. Pacientes adoloridos, con fiebre alta y fuertes dolores musculares esperan ser atendidos por un especialista.
El principal centro asistencial reportó 62 pacientes hospitalizados por dengue; los niños siguen siendo las principales víctimas del vector: 54 de estos 62 hospitalizados son menores de edad.
“Seguimos teniendo incidencias de pacientes que ingresan con síntomas de dengue; sin embargo, vamos a la baja”, informó Saíd Norales, vocero del Hospital Escuela.
Norales destacó que, pese a que todavía es una cifra considerable, han registrado una leve disminución en el número de hospitalizados, ya que en semanas anteriores la cantidad de pacientes oscilaba entre los 80 y 90.
Falta de medidas
Las acciones tardías de la Secretaría de Salud (Sesal), el mal uso de los recursos médicos y la falta de colaboración con especialistas han agravado la situación, dejando a miles de hondureños en una lucha desesperada por la vida, señaló la expresidenta del Colegio Médico de Honduras (CMH), Suyapa Figueroa.
“Los médicos del país tienen bien clara la ruta que se debe seguir, pero no hay acercamiento”, informó Figueroa. La galena cuestionó la falta de acción de la Secretaría de Salud con el tema del dengue.
“La Secretaría no ha hecho lo suficiente para controlar al vector; debieron hacer vigilancia de la presencia del vector”, mencionó.
Agregó que no se prepararon, pese a que la época de lluvias ya estaba cerca.
“En época de lluvia, los reservorios de agua quedan estancados; esto hace que se incremente el número de vectores y, claramente, al haber un incremento del vector, se dispara el número de casos”, explicó la doctora.
Destacó que no ha visto iniciativas para eliminar el zancudo adulto, que son quienes ponen los huevos y al crecer se convierten en vectores del dengue.
Los expertos en epidemiología no se muestran sorprendidos ante la magnitud del brote.
“La gente no está colaborando, el dengue está en su peor fase”, advirtió el experto en enfermedades infecciosas, Tito Alvarado.
A su vez, resaltó que los países en vías de desarrollo son los que más sufren, ya que el dengue también es un problema socioeconómico
