La poca seriedad con la que los diputados del Congreso Nacional abordan los temas durante las sesiones en pleno, se pone en evidencia tras conocerse detalles de lo que aconteció el día en el que los ‘padres de la Patria’ aprobaron la tasa aeroportuaria, que consistía en el cobro de 17 dólares para los viajeros que entraran o salieran de Honduras por la vía aérea.
Ahora que se conoció que el presidente Porfirio Lobo no sancionará el decreto que daba vida al “trancazo” y que fue rechazado por la sociedad, los diputados se “tiran la pelota” unos a otros, queriendo justificar su participación en la sesión.
Los parlamentarios hacen uso ahora de los diferentes medios de comunicación para lavarse las manos y declarar que fueron sorprendidos, mientras otros aseguran que a nadie se le obligó a votar a favor de la medida
Nora de Melgar se molesta
Este día la vicepresidenta del Congreso Nacional, Nora de Melgar, dijo sentirse molesta pues ahora la quieren hacer ver como la villana, ya que fue a ella a quien le correspondió ese día presidir la sesión en la que se aprobó la cuestionada imposición.
Melgar dijo resentir la actuación del secretario del Legislativo, Rigoberto Chang Castillo, quien ahora sale en defensa del presidente del Congreso, Juan Orlando Hernández a quien exime de responsabilidad por no haber sido él quien dirigiera la sesión.
“Estoy molesta con el abogado (Rigoberto) Chang Castillo, porque envió un mensajito a un programa de televisión diciendo que no era el presidente Juan Orlando Hernández quien dirigió la sesión sino que lo hice yo, queriéndome echar la culpa”, manifestó la diputada.
La vicepresidenta dijo no creer que se trate de una trampa en su contra, en vista de que ella pertenece a la llamada “Alianza por la dignidad”, la que es integrada por diputados que no son afines a Juan Orlando Hernández.
Diputados no se dan cuenta de lo que aprueban
Nora de Melgar es de la opinión que ningún diputado puede decir ahora que fue sorprendido, aunque ella misma admitió desconocer a qué empresa se le adjudicaba el contrato para de seguridad en los puntos fronterizos.
Detalló que el proyecto de decreto fue leido y discutido, y que cada diputado tuvo la oportunidad de opinar sobre el mismo.
La diputada mencionó que la razon por lo que ahora sus compañeros dicen haber sido sorprendidos, es porque no ponen atención durante las sesiones, pues mientras se hace la lectura de las diferentes mociones o proyectos de certero, los parlamentarios platican entre ellos y restan importancia a lo discutido.
“Muchos veces se leen los decretos y algunos de los diputados están platicando, no se dan cuenta ni escuchan lo que está pasando”, relató.
Por último, Melgar manifestó que lo bueno ahora es que se puede rectificar, sobre una imposición que es rechazada por la mayoría en Honduras.
Apuntó que esto debe servir de experiencia para el futuro; mientras, sectores de la población muestran su preocupación por la actuación de quienes fueron electos para dirigir los rumbos del país, y a quienes parece no importarles los intereses de la mayoría.
