CHOLUTECA, HONDURAS.- En Honduras siguen muriendo niños con microcefalia producto del zika y sin recibir ayudas.
Tal es el caso de la pequeña Alicia, quien falleció tras una ardua lucha en contra de la enfermedad y la pobreza.
EL HERALDO realizó hace unos meses una serie de reportajes a la que denominó “Los hijos del zika”, en los que evidenció la crítica situación que viven estas familias de la que es parte doña Mirtha Oviedo, una madre que con mucho esfuerzo trató de sacar adelante a Alicia durante sus siete años que estuvo con vida.
Doña Mirtha develó la crisis que pasaba con la niña, entre la pobreza extrema. Junto a su esposo luchaban contra este flagelo que enfrenta el 70% de la población, pues no contaban con un trabajo y lo único que podían hacer para obtener dinero era vender tortillas.
Al conocer el drama detrás de estas historias de familias con niños con microcefalia a raíz del zika, EL HERALDO contactó al ministro de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), José Cardona, para que les brindara ayudas y pudieran salir adelante con sus hijos. Pese a que se comprometió a apoyar, hasta la fecha, no se registra una solo ayuda para estas familias hondureñas.
Este rotativo lo contactó en reiteradas ocasiones para que atendiera el clamor de la Asociación de Madres con Niños con Microcefalia, pero no ha habido respuesta.
Los menores siguen muriendo y sus desesperadas madres no cuentan con dinero ni un empleo porque se dedican al 100% al cuidado de sus hijos.
Doña Mirtha sufre de varias enfermedades que -en su tiempo cuando cuidaba de Alicia- no se trató a tiempo y fueron avanzando.
“Tengo lipomas en el cuello y dicen los doctores que me han ido creciendo por toda la depresión que he vivido. Al igual tengo tiroides, y me mandaron a hacer una biopsia que cuesta 12 mil lempiras y yo no lo tengo, por eso pido ayudas”, expresó afligida.
Los hondureños de corazón noble que deseen ayudar a doña Mirtha en su tratamiento pueden contactarse con ella al número de celular +504 3316-5431.