VEA: Artículo de Octavo Carvajal: Ale, Soraya, ¡falta “Cubeta”!
Y aunque Argueta no habló de tiempos, asoma el ocaso de Juan Orlando Hernández Alvarado quien, igual que su antecesor y presunto enemigo Porfirio Lobo Sosa, reafirmó una y otra vez, que los fiscales neoyorquinos hundieron a “Tony” Hernández y Fabio Lobo, hermano e hijo respectivamente, basados en alegatos de narcos confesos rendidos ante la DEA o extraditados.
RUIDOS
Desde la captura de Arnaldo “El Negro” Lobo (primer expatriado por drogas) los burgueses viven su suplicio. No todos los aludidos en cortes estadounidenses por narcos están pedidos, mientras aquí andan idos con “héroes”, entre civiles, policías y altos oficiales que nadie cuenta de su destino. El imperio tiene su sutil forma de armar la madeja entre el sigilo de poderosos.Apresado Fabio cayeron empresarios liados a política y después de “Tony” los grandes no tienen paz en sus sillones de oro. La embestida es, para unos, justa y, para otros, injusta. No obstante, esa reforma al artículo 102 abrió la puerta para quienes salgan rociados en la narcoactividad. Ciertas excepciones de pronto casuales frenan la salida de unos señorones… las alarmas repican en casonas y fortines.
En ese vaivén de unos y otros, muchos se preparan y “arman” para evitar un feroz ataque del régimen de Joe Biden que, según vemos, no está para tientos con ningún estirado. Antony Blinken, secretario de Estado, no se anduvo con rodeos y tiró directo al pecho a Lobo Sosa. “Usted y su familia no pueden entrar más a Estados Unidos” porque “usted (“Pepe”) hizo negocios con Los Cachiros”, sentenció.
AÚLLOS
Como un lobo, el expresidente cacho no para de aullar. “A mí que me investiguen”, insiste el olanchano que igual, a su manera como Sinatra, es rival con su exquerido JOH quien podría estar muy enredado por el norte donde truenan nombres de galanes catrachos liados al mundo narco. En medio de su aparente odio, Lobo Sosa y JOH coinciden que los fiscales avalan cantos de narcos y que cierta prensa lo aplaude.ADEMÁS: Artículo de Octavio Carvajal: “Muñecas” de la mafia
Hay turbación en pasillos políticos y financieros por las recientes capturas de capos de la droga -por cierto, jóvenes- que se movían felices como lombrices por todo el país, regando billete a diestra y siniestra sin generar (curioso) dudas en la banca nacional ni en los mandos antidrogas que juran husmear todo. Allá los tienen con ficha de pillos y aquí los ven como píos. Así los tamales que los gringos envían. Parece que los tratos podrían cambiar. Los pedidos deberán tener pelos y señales.
Las cosas se siguen poniendo duras y los señores, a nuestro ver, estarían cerrando filas ante nuevos ataques. Muchos versados hablan y hablan porque solo ellos(as) tienen la “verdad” cuando los consultan sobre este tipo de temas. Sin embargo, disentir, especular, es válido para todos y lo que notamos en temas de extradición, no es tanto negar a próximos pedidos, pero sí trabarlos.
SERIOS
Hablar de atar envíos -pensamos, como es nuestro derecho- es que la justicia local no obviará sus pactos con el imperio, pero le pedirá sustentar cada solicitud. En palabras llanas, no solo girar un pinche oficio a la Secretaría de Relaciones Exteriores exigiendo a cualquier ciudadano (también extranjero) por delitos de crimen organizado y otros, sino pruebas claras, precisas y no simples soplos en su contra.Las entrelíneas deben leerse bien y mucho más si las dice un alto funcionario como lo es el presidente del Poder Judicial, Rolando Argueta, quien, a cuatro meses de concluir el régimen (no su período como juez), expresó que cuando se trata de extradiciones, el pleno de magistrados solo se basa en un “auto acordado de la Corte anterior. ¡Ah!, por ahí vamos.
¿Una ley de extradición?, se preguntará la gente o harán bulla aquellos(as) sabelotodo. Los gringos estarían, creemos, obligados a enviar, entre muchos requisitos, a fiscales con pruebas irrefutables (no solo alegatos de narcos) para entregar extraditables según los “filtros” locales. Botones para…
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