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¡Fiesta en las alturas! El teleférico de la Virgen del Socavón en Bolivia

El Carnaval de Oruro tuvo este año un incentivo extra: la inauguración de un moderno sistema de transporte turístico

FOTOGALERÍA
24.02.2018

Sucre, Bolovia
Allá va él, con su impresionante sello de sigilosidad. Vagón moderno en el riel del cielo. Inicia el recorrido que en total sumará casi un kilómetro.

Todo comienza allá abajo en la famosa Plaza del Folclore y todo no termina en el cerro Santa Bárbara… allá arriba le espera el monumento escultórico de La Candelaria, con su mitológico santuario Virgen del Socavón.

Hay 14 grados centígrados y alguno que otro chubasco que le pone drama al escenario. Oruro le llaman a esta capital de la boliviana Provincia del Cercado que tendrá algunos 300 mil habitantes y una altitud de 3,735 metros sobre el nivel del mar.

Casi nada. Acaba de terminar el Carnaval de Oruro y la calle huele a resaca. No es para menos. Durante 10 días (del 3 al 13 de febrero) el pueblo vivió un completo frenesí con la presencia de unos 250 mil turistas que ubican esta fiesta popular un par de escalones debajo del Carnaval de Río de Janerio en Brasil.

La Virgen María. La Pachamama (Madre Tierra). El diablo. Aguardiente fermentado de maíz. Música. Los indígenas urus. Las cholas que bailan a destajo todo el día. Y máscaras. Muchas máscaras; hay color y pasión en este sanguíneo febrero de Oruro. Hay mucha hermandad y allá arriba, en la cima del cielo, aparece ella, la Virgen del Socavón, para ver cómo los bolivianos bailan y se divierten como unos loquillos.

Son 48

grupos folclóricos los que dan vida al Carnaval de Oruro.

Y mientras el cable de tracción deja asomar un nuevo funicular, en la calle se suelta la rienda y los diablos avanzan en dos columnas encarnando a los siete pecados capitales.

Realmente ha comenzado la “Diablada”, la más popular de las danzas del carnaval que simboliza la lucha del bien contra el mal; luego aparecerá la “Morenada”, en donde los bailarines usan máscaras de negros y se mofan de las danzas blancas.

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Gracias, virgencita...
Los más viejos, que pululan sin celulares y con muchas canas por el lugar, cuentan que desde 1789 se decidió guardar reverencia a la Virgen del Socavón. ¿Por qué? Hay varias leyendas. Una dice que esta figura incorporada por los españoles apareció sobre el cuerpo inerte de un ladrón que se refugiaba en uno de los socavones del cerro Pie de Gallo: aseguran que, tras ser apuñalado, la Virgen lo socorrió y le salvó la vida.

Patrona del folclor nacional, es venerada principalmente por los mineros, que le agradecen por las riquezas naturales que nunca faltan en los socavones de las minas. A manera de estatua, desde 2013 se construyó una escultura de 45 metros de alto, bendecida por el papa Benedicto y que se erige imponente, en actitud de protección...

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El teleférico, la atracción de 2018
Claro que sí. Para llegar a la patrona de los mineros y tenerla unos instantes frente a frente ya hay teleférico.

Dos años y medio tardó su construcción y desde el 7 de febrero que se inauguró une al sector sagrado donde se ubica la estatua de la virgen en el cerro Santa Bárbara con el Socavón. Tiene dos estaciones y 16 cabinas y, mitad gobierno central y mitad gobernación local, se invirtió 18.4 millones de dólares.

Hay una espectacular toma desde un dron en donde se mira desvanecerse a la Virgen del Socavón para dar vida a una cuadrícula llena de niebla densa a lo lejos. Sobresalen mil casas viejas y algunos edificios modernos.

Oruro no ha parado de gritar por culpa de su hermoso carnaval y guarda un minuto de silencio por la muerte de ocho personas el pasado 11 de febrero a causa de la explosión involuntaria de una bomba de gas. Oruro celebra en silencio...