SAN PEDRO SULA, HONDURAS.-Tras arrebatarle la vida a su esposa a sangre fría y sin ningún remordimiento, Carlos Antonio Bardales, su pareja sentimental, confesó ser culpable de este horrible crimen.
La víctima, quien fue identificada como Rosa Delia Ramírez Mancía, fue asesinada por su pareja Carlos, el domingo en horas de la noche, en su misma vivienda en la aldea El Ocotillo, San Pedro Sula.
El ahora detenido, fue buscado y capturado por pobladores de la zona en la aldea El Ocotillo, luego de encontrarlo sospechoso de la muerte de su esposa.
Bardales fue golpeado y amarrado por los mismos vecinos, hasta que llegaron las autoridades policiales al lugar.
Tras ser goleado, Bardales confesó el crimen de su esposa y aseguró que la mató con varios machetazos.
“A puro machete, la amarré”, dijo sin ningún remordimiento.
Antecedentes por maltrato
Según declaraciones brindadas por los vecinos y familiares, Carlos Bardales había sido arrestado por maltratar a su pareja, Rosa Mancía.
Esta situación fue dada en reiteradas ocasiones; sin embargo, tras el arresto, Bardales quedó en libertad luego de que Mancía retirara la denuncia.
Rosa era muy conocida en la zona, ya que tenía una pulpería. Además, era madre de tres hijos, de los que dos eran de Carlos Bardales.