EL PROGRESO, YORO.- Dos sicarios que se hicieron pasar como clientes llenaron de dolor en segundos a una familia, al quitarle la vida al policía Wilberto Teruel Lemus, de 38 años de edad.
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El uniformado fue asesinado a balazos a eso de las 8:45 de la noche del martes en su pulpería ubicada en el barrio Los Pinos de la ciudad de El Progreso.
Las autoridades informaron que a esa hora Teruel estaba gozando de sus días libres por el feriado de Navidad, estaba atendiendo en su negocio cuando llegaron dos tipos que simularon que iban a comprar.
Cuando salió a atenderlos, le dispararon en varias ocasiones y huyeron en una motocicleta en la que se transportaban.
Personas que estaban en el lugar y presenciaron el hecho criminal, relataron a la Policía que Wilberto Teruel quedó con vida tras el ataque y salió de su negocio a pedir auxilio, pero expiró a los pocos minutos debido a que los proyectiles le dañaron órganos vitales.
Según las indagaciones preliminares, el posible móvil del asesinato de Teruel Lemus es la extorsión en su negocio porque no hubo robo y los familiares del ahora occiso afirman que no tenía enemigos ni problemas con nadie.
Los parientes de Wilberto Teruel manifestaron que sospechan que la muerte le provino por el problema de la extorsión. Las autoridades policiales dieron a conocer que en la escena del crimen recolectaron indicios que servirán para esclarecer el crimen de su compañero.
Además de eso, en la zona funcionan varios negocios y en los locales hay cámaras de seguridad, cuyos videos aportarán elementos para la indagación.
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Un policía dedicado
Óscar Garay Sevilla, vocero de la Policía en El Progreso, manifestó que recibió a Wilberto Teruel en el año 2007, recién egresado del Centro de Instrucción Policial de La Paz, y lo describió como un agente dedicado con abnegación a su servicio que estaba asignado hace varios años a la seguridad del alcalde Alexander López.
Agregó que tenía su hoja de servicio limpia y estuvo asignado en varias unidades de la Policía, incluyendo labores de apoyo a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
También se desempeñó en áreas preventivas en patrullajes y a raíz de “esa conducta respetuosa y responsable en sus asignaciones, la superioridad lo seleccionó para ser parte de la Dirección Nacional de Servicios Especiales, que se encarga de darle seguridad a dignatarios, diputados, alcaldes y a personas que solicitan protección a través de los organismos de derechos humanos”.
Teruel era un “buen compañero y lamentamos mucho su muerte”, manifestó.
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