TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Según el último reporte del Comité de Emergencia Municipal (Codem), el deslizamiento de tierra y las caídas de rocas que se registraron en la colonia Villa Nueva el pasado fin de semana dejaron a cinco familias afectadas.
Dos de estos núcleos se encuentran albergadas en la Escuela Moisés Starkman en Villa Nueva y en la Escuela Carlos Luis Vargas en la colonia Los Pinos.
“Las otras familias están siendo monitoreadas porque no quisieron salirse, y son las que están en el pico del cerro”, comentó Carlos Bonilla, subgerente del Codem.
El funcionario aseveró que como autoridades están atentos a cualquier incidencia que pueda ocurrir.
“Los equipos de control y seguimiento están en constante vigilancia de la zona”, reiteró el entrevistado.
EL HERALDO realizó un recorrido por la zona y constató que la vía que viene de Ciudad Danlí hacia Tegucigalpa sigue obstruida por la tierra y las rocas que se desprendieron.
No obstante, Bonilla mencionó que se está trabajando en el sector para abrir el tramo afectado.
Monitoreo
Los monitoreos en Villa Nueva continuarán, ya que los pronósticos indican más lluvias para la capital.
Este sector es considerado de alto riesgo debido a los bloques de deslizamiento que se activan, principalmente en época de lluvias. “Nosotros estamos alertas por cualquier emergencia que se presente”, mencionó uno de los ciudadanos que vive cerca de la zona afectada.
En la colonia Canaán también se reportó otra familia afectada por derrumbes, la cual se encuentra albergada en el centro comunal de la colonia capitalina.
