TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El Programa Monetario 2024-2025 publicado el lunes anterior por el Banco Central de Honduras (BCH) ha dejado claro el panorama económico en el corto y mediano plazo.
A pesar de que se proyecta un crecimiento económico entre 3.5%-4.5%, mayor que el 3.6% de 2023, los agentes demandantes de divisas continuarán con las restricciones de acceso a dólares en la subasta.
Uno de los retos que el BCH plantea es fortalecer el mercado cambiario ante la disminución del ingreso de divisas por la caída en la oferta exportable de café, aceite de palma y camarón cultivado, aunado a la moderación en el ritmo de crecimiento de las remesas familiares, asociado al comportamiento previsto en el mercado laboral estadounidense. Las proyecciones son que las exportaciones crezcan 2.3%, mejor que la caída de -7.3% de 2023 en relación a 2022 cuando el valor exportado bajó de 6,116.2 a 5,951 millones de dólares.
En remesas se espera que sumen 9,518 millones de dólares, o sea 276 millones más que 2023. Ante ese panorama el Banco Central de Honduras propone continuar fortaleciendo el mecanismo de asignación de divisas y el mercado cambiario, con el apoyo técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI), que permita seguir mejorando la democratización, eficiencia y equidad en la asignación de divisas a los demandantes.
Expectativas
Manuel Bautista, expresidente del BCH, dijo a EL HERALDO que habrá menos disponibilidad de divisas por el problema del bajo precio del café y por la caída de 500,000 quintales en exportaciones. No obstante, sostiene que se proyecta un crecimiento de 5% en la entrada de remesas familiares.
Sostiene que la restricción de divisas se deriva de la mayor demanda de dólares como consecuencia del nivel de incertidumbre que existe en el país. Explica que la demanda diaria ha oscilado entre 80 y 90 millones de dólares, pero en junio de 2023 alcanzó $250 millones.
El sector privado ha continuando denunciando este año que tiene problemas de acceso a dólares.