EL HERALDO Plus llegó adonde están cientos de niños y niñas que solo han visto el rostro de su madre una vez, cuando nacieron, pero que jamás la recordarán porque fueron abandonados y nadie volvió a preguntar por ellos
Niño hondureño no se cansó de buscar a su madre hasta que la encontró y conoció a sus hermanos
Las mismas autoridades del extinto Ihnfa separaron al pequeño de su madre por muchos años, pero él sabía que existía y, luego de una ardua búsqueda, la lograron hallar. Hoy la ha visitado varias veces
Los niños siempre preguntan ¿quién es su madre?, ¿donde está? y no se dan por vencido hasta encontrarlas, aunque los rechacen.
mar 28 de febrero de 2023 a las 15:0
1 min. de lectura
TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El pequeño Antonio (nombre ficticio en cumplimiento a los derechos de la niñez) sabía que su mamá estaba viva, que en algún momento de su vida estuvo con ella y su mayor anhelo era poder volver a abrazarla.
El jovencito era originario de San Pedro Sula y perdió a su progenitoria cuando ambos entuvieron internos en el desaparecido Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Inhfa).
La separación se provocó debido al desorden de las autoridades anteriores, porque el pequeño Antonio estaba en el hogar de los niños y la madre al otro extremo, en el Programa de Madres Adolecentes.
Luego de ser separados, porque la progenitora era muy joven, él fue trasladado a los 4 años a una casa hogar en la carretera hacia Olancho. Llegó con problemas de lenguaje, pero decía que tenía mamá y que se llamaba “machicha”.
El equipo comenzó a deducir si era Maritza, o algún nombre parecido, porque tampoco se sabía el nombre de él, ya que el Ihnfa lo entregó hasta sin partida de nacimiento.
Solo se sabía que había llegado de San Pedro Sula. Sin otra pista se buscó ayuda del Ministerio Público (MP). Él colaboraba al señalar por donde vivía. Aunque iban a buscar el lugar, no daban con nada.
Antonio tenía esa gran necesidad de reunirse con la mamá y, por eso, los equipos de búsqueda a cada pista que encontraban le daban seguimiento, paso por paso, preguntando con vecinos o registros.
Solicitaron apoyo al Registro Nacional de las Personas (RNP) y encontraron una partida de nacimiento, detectando que al niño no lo había inscrito la mamá, sino una abogada del Ihnfa.
Después de un largo proceso, el año pasado, con la actualización del Censo Nacional y el nuevo Documento Nacional de Identificación (DNI), lograron comprobar quién era la madre y hallaron la dirección.
Al final lograron encontrar a su progenitora y para él fue una alegría total. Así se hizo la primera visita supervisada, luego la segunda y se le dio un permiso especial para que esté solo con la familia.
Lo van a dejar y a traer donde su familia. La mamá lo recibió con mucha alegría, no lo rechazó, los dos se abrazaron, lloraron. Antonio se dio cuenta que ya tenía hermanitos y estaba muy alegre, porque decía que se parecían a él.