CORTÉS, HONDURAS.- Un hombre murió trágicamente la noche del jueves en la colonia Pradera del municipio de San Pedro Sula, en el departamento de Cortés, cuando intentaba bajar mangos de un árbol.
La víctima fue identificada como Melvin José Chinchilla López, quien murió tras resbalarse del árbol y golpearse cuando cayó aparatosamente sobre la calle de tierra.
Su cuerpo quedó tendido boca abajo en un charco de sangre y aunque los vecinos intentaron auxiliarlo ya era demasiado tarde.
Versiones preliminares indicaron que por el árbol atraviesan algunos cables del tendido eléctrico, por lo que creen que pudo haber recibido alguna descarga eléctrica antes de resbalar y caer.
Su esposa, Saira Paz, lloraba desconsolada ante la irreparable pérdida y dijo sentirse impotente porque estuvieron juntos durante 12 años y él era sus sustento económico y su apoyo en todas las actividades, pues ella se encuentra en silla de ruedas.
“Él era mi todo, el que dormía conmigo, el que me cuidaba, me cambiaba y ahora no sé...”, relató la fémina con lágrimas en sus ojos.
Una inocente petición
Según la pareja del fallecido, el percance ocurrió por querer venderle mangos a una vecina, pues al llegar a visitarlos, la vecina vio que tenían una semilla de mango y les preguntó dónde podía conseguir unos.
Saira dice que su esposo “tenía tres días yendo a bajar mangos, porque a veces uno tiene para comer y a veces no. Anteriormente había vendido 100 lempiras de mangos”, entonces ella, al ver la oportunidad, le comentó a su vecina que en un árbol cercano habían muchos de estos frutos y le pidió a su esposo que fuera por ellos.
“Andá bajá (mangos)”, recordó haberle dicho y la respuesta que él le dio la dejó conmovida, pues Melvin dijo que sí, la abrazó y antes de marcharse le susurró: “Te amo”.
Ella recuerda que le pareció un comportamiento extraño, pero no le tomó mayor importancia. Ahora piensa que “presentía lo que le iba a pasar”.
“Si yo le decía algo, él lo hacía y se fue a traer los mangos con mi nieta, de repente ella vino corriendo y me dijo: ‘Se cayó mi papi’”, continuó relatando la mujer.
Ayuda
El cuerpo de Melvin no fue llevado a la morgue para practicarle la autopsia, pues su familia fue quien hizo el levantamiento y preparó su cuerpo en su vivienda.
La mañana de este viernes su cadáver fue colocado sobre una mesa, envuelto en sábanas, pues su familia no tenía el dinero para comprar un ataúd y velarlo. El patronato de la zona les ayudó a conseguir un terreno para darle sepultura en el cementerio del sector Rivera Hernández.
La acongojada mujer, dijo que ahora que su esposo falleció ella quedará desprotegida, por lo que pidió a las personas que deseen ayudarla contactarla al número de teléfono: +504 9549-5262.