TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Con un fuerte resguardo policial amanecen las instalaciones del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), la mañana de este martes -10 de octubre- tras zafarrancho protagonizado por los colectivos de Libertad y Refundación (Libre).
Cabe recordar que las acciones de protesta iniciaron desde el pasado domingo y finalizó hasta ayer lunes por la tarde, tras un enfrentamiento con empleados de esa entidad, en medio de lluvia de piedras y palos, ante la lenta reacción de los elementos policiales.
Las acciones se realizaron frente a las instalaciones en el barrio La Bolsa de la capital, inicialmente por la falta de pago en sus salarios, pero luego se dio un fuerte enfrentamiento con colectivos de Libre.
En ese sentido, el gerente general de la estatal, Ricardo Panchamé explicó que la presencia de los uniformados, brindará seguridad a los empleados, quienes deben presentar su carnet para verificar si laboran en la institución.
De acuerdo a lo explicado por el funcionario, el conflicto no se debe a una pelea entre colectivos de Libre, sino de personas que han utilizado el partido Libre para tener beneficios propios.
“Melvin Ceballos ha traído un descontrol en las bases del partido Libre y en las situaciones partidarias, él no es parte de los colectivos, trabaja a título personal y se autodenomina coordinador de territorios de base, pero Libre lo desconoce”, aseguró.
Asimismo atizó contra el coordinador de los colectivos, Melvin Ceballos, al asegurar que no pertenece al partido oficialista y no es “reconocido por ninguna dirigencia de nuestro partido Libertad y Refundación”.
Sobre los pagos adeudados por dos meses informó que las gestiones “están muy avanzadas”. “Eso está muy avanzado y tenemos buenos resultados, el proceso inició hace dos meses atrás, se agradece a la ministra de Finanzas”, afirmó Panchamé.
El también abogado espera que para finales de octubre se hagan efectivo los pagos atrasados a los empleados, quienes criticaron la gestión del profesional del derecho al frente de la estatal.
Hasta el momento, el ambiente en el lugar es pacífico, contrario a los dos días anteriores, pues varios peatones y conductores de vehículos que transitaban por el lugar estuvieron en riesgo de salir lesionados por los disturbios.
